BURGOS, 23 Jul. (EUROPA PRESS) -
El equipo de investigadores de los yacimientos de la Sierra de Atapuerca (Burgos) ha cerrado una campaña de excavaciones con resultados positivos pese a las limitaciones motivadas por la pandemia de la COVID-19, que ha limitado en días y número de trabajadores los trabajos en el enclave.
Así lo ha señalado este jueves el consejero de Cultura y Turismo de la Junta de Castilla y León, Javier Ortega, quien se ha desplazado hasta la emblemática sierra burgalesa para conocer de primera mano los resultados de la campaña estival.
Ortega ha aprovechado la ocasión para mostrar su satisfacción por el hecho de que la actual situación sanitaria no haya ralentizado la "exitosa" trayectoria de Atapuerca y ha repasado las inversiones que desde la Consejería se han realizado en los últimos años en este emplazamiento.
La gran novedad de esta campaña ha sido, precisamente, la aparición en el yacimiento de Gran Dolina de dos utensilios de cuarcita, una lasca y un canto tallado, que evidencian la presencia humana en la sierra en una franja temporal de entre 500.000 y 600.000 años, de la que no había evidencia en ninguna de las cavidades hasta el momento.
En este yacimiento, un total de nueve personas ha trabajado en el tramo superior de este lugar, lo que ha permitido ahondar sobre sedimentos fines que se encontraban rellenando una serie de pozas erosivas formadas por la acción del agua sobre las brechas carbonadas del nivel TD8 y que no han conservado fauna, aunque sí industria ilícita.
SIMA DEL ELEFANTE
En el yacimiento de la Sima del Elefante, los resultados obtenidos han sido muy positivos y han cumplido los objetivos planteados para esta campaña, que pasaban por centrar la excavación en el nivel TE7 y eliminar los grandes bloques de caída de techo que se asentaban sobre dicho nivel.
La erosión y la caída al interior de la cavidad de parte del techo de la cueva tuvo lugar hace alrededor de 1,4 millones de años y produjo sedimentos arcillosos en el nivel siete, en más antiguo de los conocidos hasta el momento en el enclave.
En este yacimiento se han localizado restos de tortuga, oso y castor, lo que refuerza la hipótesis, ya planteada anteriormente, de que las condiciones ambientales de la Sierra de Atapuerca hace 1,4 millones de años eran más húmedas y templadas.
Por su parte, el yacimiento de Cueva Fantasma ha centrado el trabajo en esta campaña en varios de sus sectores, con el propósito de disponer de una secuencia diacrónica del registro arqueológico del mismo y planificar futuras acciones en el mismo.
Finalmente, en el yacimiento de Cueva Mayor se ha intervenido en la Galería de las Estatuas, donde la gran novedad de esta campaña ha sido la excavación de la boca de entrada de esta cavidad, que se cerró hace aproximadamente 50.000 años.
En esta cueva habitaron los neandertales y se ha recuperado importante industria ilícita realizada a partir de materiales como el sílex, la cuarcita y la arenisca, presentando además una clara afinidad con el tecnocomplejo musteriense, el de esta especie.
