El nuevo modelo residencial contemplará profesionalización de directivos y dotación mínima de EPI

   VALLADOLID, 28 Abr. (EUROPA PRESS) -

   La consejera de Familia e Igualdad de Oportunidades de Castilla y León, Isabel Blanco, ha abogado por la profesionalización de equipos directivos, la dotación mínima de equipos de protección individual (EPI) y la monitorización de centros como aspectos más urgentes de un nuevo modelo residencial que pretende abordar y tras la situación generada por la pandemia de coronavirus.

   Blanco se ha expresado así en su comparecencia en las Cortes de Castilla y León para explicar las medidas tomadas frente a la COVID-19 en una Comisión que ha arrancado con un minuto de silencio en recuerdo de las víctimas de la pandemia y con la petición de disculpas por parte de la consejera por los errores que se hayan podido cometer.

   En este contexto, Isabel Blanco ha asegurado que hay que "repensar" el modelo, algo que tiene "claro" y que ya había dicho desde su toma de posesión, para lo que ha afirmado que se creará un grupo de trabajo que aborde la realización de una Ley de Atención Residencial.

   Sin embargo, cree que tras lo ocurrido con la pandemia hay algunas cuestiones que abordar de "manera inmediata" como la exigencia de un acopio mínimo de equipos de protección en función del tamaño de la residencia y el perfil de los usuarios, más aún ante la posibilidad de que el coronavirus pudiera reaparecer en octubre.

   Pero además cree que hay que "avanzar" en otros aspectos como en la formación y preparación del personal directivo o la implantación de una herramienta informática que permita conocer en tiempo real los usuarios de los centros y sus características en cuanto a su autonomía personal, el personal de que dispone cada centro tanto en número como de perfiles profesionales y sus incidencias.

   La consejera ha incidido en que aunque se ha diseñado una buena aplicación, quieren tener una situación "real" del día a día para poder actuar de una manera "más rápida" en los centros donde se detecta que pueden tener carencias. Esto permitirá conocer la situación de cada centro de manera instantánea e incrementar en caso necesario, el número de inspecciones.

UNIDADES DE CONVIVENCIA

   Isabel Blanco, quien ha aclarado que el decreto que regulaba el modelo residencial y que actualmente se encuentra en el Consejo Consultivo queda en suspenso, ha afirmado que se pretende continuar con el desarrollo del modelo de las unidades de convivencia, en la línea que proponen los expertos, así como el uso individual de habitaciones como estrategia, no solo para mejorar el bienestar de las personas, sino también para evitar la propagación de los contagios, algo que se ha demostrado eficaz en situaciones como la de la COVID-19.

   Además de que permite aislar mejor en estos casos, ha añadido la titular de Familia, no sólo se trata de una cuestión de espacio físico, sino porque este modelo contempla los profesionales de referencia.

   Blanco ha asegurado que quieren llegar a un gran acuerdo porque este modelo "tiene que ser un proyecto de todos", tanto de los grupos parlamentarios como de los profesionales, las entidades locales, el sector, los expertos o los usuarios.

   En este marco, ha señalado que habrá que estudiar cuestiones como si la atención sanitaria que se da en esos centros tiene que ser pública o privada, propia de las residencias, por ejemplo, pero ha abogado por "sentarse y debatir", analizar lo que ha pasado con la pandemia y cómo enfrentarse en el futuro a esta situación.

   Por ello, ha explicado que el objetivo es constituir un grupo de trabajo "a la mayor brevedad" para abordar los temas más urgentes, aunque otras cuestiones se deban tratar "en profundidad y de manera sosegada" para llegar a un acuerdo que es lo que se les "reclama", que se aprenda de esta situación y se intente que no se vuelva a repetir en la medida de las posibilidades, teniendo en cuenta que a lo que se han enfrentado es una enfermedad.

   En cualquier caso, ha reiterado que se apuesta por el modelo "A gusto en mi casa" y por que la gente sea capaz de quedarse en casa el mayor tiempo y proporcionarles el mayor apoyo, ya que a las residencias cada vez en mayor medida las personas que llegan son las que tienen mayor grado de dependencia.