LEDESMA (SALAMANCA), 27 (EUROPA PRESS)
La Fundación del Patrimonio Histórico de Castilla y León invertirá más de 400.000 euros en la restauración y puesta en valor de la Iglesia de Santa Elena de Ledesma en Salamanca, según informaron a Europa Press fuentes de la Fundación.
Los trabajos, cuyo plazo de ejecución no excederá los once meses, consistirán en la reposición completa de la cubierta, reparación de fábricas, saneamiento exterior de la base de los muros y sustitución de la tarima.
En concreto, la Fundación ha sacado a concurso, abierto hasta el 14 de diciembre, los trabajos de restauración y puesta en valor de la Iglesia de Santa Elena de Ledesma, en Salamanca con un presupuesto de licitación de 381.689, 66 euros.
Tras realizar estudios previos, catas murales, y arqueología, y que han supuesto un coste cercano a los 20.000 euros, la Fundación ha elaborado el proyecto de intervención y que determina actuaciones en la cubierta, reparación de fábrica, saneamiento exterior de la base de los muros y sustitución integral de la tarima.
El convenio de colaboración suscrito entre la Fundación, el Ayuntamiento de Ledesma y la Parroquia de Santa María la Mayor, propietaria del Inmueble contempla que la Fundación sufraga el 80 por ciento; mientras que la Parroquia sufraga el 20 por ciento de las partidas destinadas a restauración, más la instalación eléctrica y el arreglo de la sacristía. El ayuntamiento por su parte cofinancia directamente el pavimento y tiene a su cargo las labores de alumbrado, riego y dotación del mobiliario urbano.
LA IGLESIA DE SANTA ELENA.
La Iglesia de Santa Elena es un edificio modesto, que responde a la tipología de románico rural, pero con un peculiar perfil, puesto que el ábside es más alto que la nave.
La capilla mayor tiene una bóveda semicilíndrica, rematada por el ábside semicircular. Adosada a la iglesia y de construcción posterior, está la sacristía, entre muros de mampostería con sillares de granito.
Se accede por dos puertas -una al Norte hacia la villa, y la otra a Poniente bajo la espadaña- de trazo sencillo y un solo cuerpo con dos vanos campaneros semicirculares y remate a dos vertientes. La portada es sencilla, con arquivoltas lisas sobre jambas escalonadas con imposta de bisel. La puerta septentrional también tiene arcos doblados lisos, pero se enriquece de columnas con capiteles vegetales, labrados bajo influjos zamoranos.
Tanto la nave como el tramo presbiterial y el ábside rematan con un tejaroz sostenido por canecillos labrados que representan hojas, cabezas humanas y de animales - como la de un lobo tragándose un hombre-, un tonel, cogollos, y algunos lisos. Cabe destacar el retablo del siglo XVIII.