Tres de los cuatro detenidos por estos hechos, fundamentalmente cometidos en explotaciones ganaderas, han ingresado en prisión
VALLADOLID, 26 Nov. (EUROPA PRESS) -
La Guardia Civil atribuye a tres de los detenidos en la operación 'Rocasoil' que han ingresado en prisión 26 robos cometidos fundamentalmente de combustible en explotaciones agrícolas y ganaderas, localizadas en toda la provincia de Valladolid, e investiga su autoría en otros 40 hechos similares, mientras que imputa a un cuarto arrestado delitos de receptación y estafa al seguro.
En concreto, en el marco de esta operación se detuvo el viernes, día 22, a R.B.B, de 50 años, M.A.B.R, de 53, y A. H.B, de 31 años, todos vecinos de Valladolid, como supuestos autores de 26 delitos de robo con fuerza en explotaciones agrícolas y ganaderas, así como por el robo por encargo de piezas de vehículos en centros autorizados de tratamientos de vehículos de la provincia. Los individuos volvían en ese momento de la comisión de un robo en una explotación de Nava del Rey.
Los tres individuos, con numerosos antecedentes por robos con fuerza, fueron puestos a disposición del Juzgado de Instrucción número 6, que se encontraba en funciones de guardia el sábado y decretó su ingreso en prisión, aunque finalmente se ha hecho cargo de las actuaciones Instrucción 1.
Asimismo, se ha arrestado a J.O.L.G, de 47 años y propietario de un taller de vehículos de la Cistérniga, que inicialmente estaba asociado a una empresa de compra-venta, pero en el que también se reparaban coches ajenos a la misma. Al individuo se le considera receptor de las piezas robadas --numerosos faros de vehículos se encontraron ocultas bajo un elevador-- y parte del gasóleo, aunque en este caso no ha ingresado en prisión, y también ha sido investigado en varias ocasiones por llevar a cabo actividades ilícitas relacionadas con la manipulación de vehículos y adquisición de piezas de origen ilícito.
Además, se le puede imputar un delito de estafa tras haberse encontrado dos máquinas de diagnosis que había denunciado como robadas al seguro.
Los tres individuos que se encuentran en prisión supuestamente robaban el combustible y probablemente por "encargo" las piezas de vehículos, en ocasiones de alto valor, que presuntamente utilizaba después en sus reparaciones el propietario del taller. Los cuatro supuestamente vendían el combustible mediante diversas fórmulas, en grandes o pequeñas cantidades, además de utilizarse en los vehículos con los que se cometían los robos.
La operación 'Rocasoil' se ha presentado en una rueda de prensa en la que han estado presentes el subdelegado del Gobierno en Valladolid, Emilio Álvarez; el coronel Juan Miguel Recio y el teniente coronel Javier Peña, quienes han destacado la importancia de la actuación por unos hechos que se perseguían desde hace tiempo y por haberse cometido en zonas rurales, donde es difícil prevenir estos hechos que generan gran preocupación entre los agricultores y ganadores.
ROBOS DE COMBUSTIBLE
El teniente coronel Javier Peña ha detallado la operación, que ha permitido desarticular una organización criminal dedicada fundamentalmente al robo de gasóleo en explotaciones agrícolas de la provincia, en instalaciones distribuidoras de gasóleo y en obras publicas que podrían suponer la sustracción de más de 76.000 litros de gasóleo A y B.
Las investigaciones se iniciaron en el mes de febrero, cuando en un establecimiento de venta al por mayor de gasóleo se produjo un robo continuado durante varios días de miles de litros de combustible y por el modus operandi y la cantidad se sospechó de que podría tratarse de un grupo organizado, por lo que "saltaron las alarmas".
Así, se puso en marcha la operación, en cuyo desarrollo se llevaron a cabo vigilancias, controles e identificaciones y se contó con la colaboración ciudadana.
Para cometer los hechos, los detenidos utilizaban al menos tres vehículos todoterreno, los cuales prepararon para ello, ya que llevaban reforzada la suspensión para poder transportar la carga y circular por caminos. Precisamente en uno de ellos, un Opel Frontera, incluso se instaló un dispositivo GPS que permitió hacer un seguimiento y ubicar los lugares donde presuntamente actuaron los integrantes del grupo, según ha podido saber Europa Press en fuentes cercanas al caso.
Los tres coches se han incautado en otros tantos registros realizados, en los que además se han intervenido 850 litros de gasóleo tipo A y B (150 en un taller, 350 en un domicilio y otros tantos en una nave) y material para la sustracción del mismo como mangueras, compresores o bidones, entre otros objetos.
Por otro lado, en el registro del taller de vehículos se intervinieron numerosas piezas de vehículos provenientes de robos en centros autorizados de tratamientos de vehículos de la provincia como las empresas de desguaces Cano y Velázquez --ambas en la capital vallisoletana--, aunque queda pendiente la comprobación del origen de una gran cantidad de piezas almacenadas.
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