VALLADOLID 14 Dic. (EUROPA PRESS) -
El mítico entrenador del Real Valladolid, Vicente Cantatore, aseguró que "la verdadera historia del fútbol se escribe en los equipos pequeños". Con esta premisa, Santiago Hidalgo Chacel comenzó a escribir el libro 'Una vaca brava en el Estadio José Zorrilla', una publicación que recoge anécdotas, situaciones, vivencias e imágenes relacionadas con la historia del club blanquivioleta.
El libro, que ha sido presentado hoy en el Nuevo Estadio José Zorrilla, ha contado con la participación de los periodistas Ángel María de Pablos, José Miguel Ortega, Juan Carlos Alonso, José Ignacio Tornadijo, Arturo Alvarado, Héctor Rodríguez, Manuel Centeno y Antonio G. Encinas, con las fotografías de Montse Álvarez, así como con la colaboración del humorista Leo Harlem.
La obra ha sido editada por el Servicio de Publicaciones de la Universidad Europea Miguel de Cervantes con el apoyo de Caja de Burgos y la Fundación Real Valladolid, según informaron a Europa Press fuentes de la UEMC.
Los relatos recogidos en el libro comenzaron a fraguarse en "aquellas cenas de los jueves después del correspondiente partidillo de fútbol y previa a la partida de mus de rigor", recuerda el autor. "Siempre regadas de buen clarete", estas curiosas notas surgen para rendirse ante un "gran grupo humano, mitad ex futbolistas, mitad aficionados, todos amigos", que se reúnen en el Restaurante 'El Truébano' desde hace ya algunos años para acordarse del fútbol y la amistad.
De allí brotaron los primeros bocetos que, "después de ser aderezadas con los condimentos de otros protagonistas, y puestas en la batidora", se mezclaron para formar parte de un programa de radio por Internet 'Radio Pucela' que, emitido desde la Universidad Europea Miguel de Cervantes, pretendió hacer algo diferente a lo ya tradicional.
"FRIVOLIZAR"
Por ellas han pasado parte de la reciente y pasada historia blanquivioleta que, sumadas a unas notas biográficas, "han dado para este pequeño escrito que pretende entretener y tal vez, quitar hierro al universo fútbol", apunta Hidalgo Chacel. Un relato que trata sólo de "frivolizar y dar a entender que detrás de un equipo, de un grupo humano, y de una competición por mucho que se diga de las mejores del mundo, siempre hay ratos de tierna humanidad sin la cual la vida nos sería imposible".
Así lo apunta el club que sufrió un accidente de autobús, un tren les arrolló cerca de Burgos; que es capaz de despedir a un entrenador en un programa de radio, o que pone a un portero de defensa central y resulta el mejor del partido; que provoca un desaguisado en el Bernabéu después de que un jugador imitara el silbato del árbitro; que contrata a un entrenador 'trotamundos' que prepara una sesión de entrenamiento a los suyos a las seis de la mañana cuando los operarios de 'Fasa' comenzaban el turno; de un gran hombre que hizo las 'Américas' y se trajo a cinco grandes jugadores a cambio de un millón y medio de pesetas que le hizo llegar después un piloto de confianza de Iberia; del fichaje del primer japonés y su séquito de veinte periodistas; de una onomástica con secuelas e intoxicaciones; del primer y único título y de las finales disputadas; del gol más rápido o la derrota en los despachos; en un estadio 'bajo cero'; de los primeros pasos en la creación del sindicato de jugadores; de un presidente visionario o del jugador tal vez más mágico y de más calidad de cuantos haya pisado un campo de fútbol; del futbolista más rentable 'económicamente hablando' o de las famosas primas a terceros; de curiosas pretemporadas y viajes, de goleadores y delanteras 'monásticas', de grandes futbolistas, y como decía el otro, mejores personas.
Santiago Hidalgo Chacel ya editó junto a la Fundación Municipal de Deportes del Ayuntamiento de Valladolid hace algunos años el libro 'Impulsos del deporte vallisoletano'.
Licenciado en Derecho, pero con vocación de periodista deportivo, dirigió el semanario 'Grada Deportiva' y ha participado en otros medios informativos. En la actualidad es gerente de la Fundación de la Universidad Europea Miguel de Cervantes y colabora muy activamente con Boecillo, pueblo del que presume a mucha honra ser paisano.