VALLADOLID, 28 Oct. (EUROPA PRESS) -
La vicepresidenta primera de la Junta de Castilla y León, María Jesús Ruiz, ha instado hoy al presidente de la Diputación de Soria, Antonio Pardo, a que "asuma su responsabilidad" como gobernante y que agote todas las posibilidades para evitar el cierre de la residencia de la tercera edad Sor María de Jesús de Ágreda, medida que, tal y como ha denunciado, va en contra de las prioridades de la política de Herrera y que no son otras que la sanidad, la educación y los servicios sociales.
Ante la sucesión de acontecimientos en torno al referido centro de la tercera edad, entre ellos el encierro de protesta en la Diputación soriana protagonizada por el Comité de Empresa y la marcha que la plataforma opositora celebrará este domingo entre Ágreda y la capital, María Jesús Ruiz, en declaraciones a Europa Press, ha salido en apoyo de todos aquellos contrarios al cierre de Sor María de Jesús, y en tal sentido ha asegurado compartir la sensación de algunos residentes "que llevan allí 55 años y que la consideran como su casa" y que ven en la clausura un auténtico "desahucio".
Así, la vicepresidenta primera del Ejecutivo ha advertido a Pardo, al igual que ella del PP, de las graves consecuencias que supondría el cierre de esta residencia, máxime, como así ha incidido, "en un provincia que, junto con Zamora, es de las más envejecidas y que cuenta con más de 27.000 personas mayores de 65 años", al tiempo que ha discrepado frontalmente con el presidente de la Diputación soriana cuando éste "se empeña en decir que Ágreda es una privilegiada porque cuenta con dos centros".
"¡No, perdone, la Diputación de Soria tiene dos residencias en Ágreda que son provinciales, de todas las personas de la provincia!", ha puntualizado Ruiz, quien como ejemplo ha recordado que actualmente tanto en Sor María de Jesús como en Nuestra Señora de los Milagros el número de residentes que son vecinos de la localidad no supera la decena, mientras que el resto pertenecen a otros municipios de la comarca.
EL CIERRE PUEDE SER DEFINITIVO
La vicepresidenta también ha asegurado compartir la incertidumbre de residentes, vecinos y trabajadores que temen que el cierre para acometer supuestas obras de remodelación se convierta pasado el tiempo en definitivo. "No es irracional lo que plantean, que no es otra cosa que garantía y seguridad de que esa residencia vaya a seguir abierta. Cuanto más tiempo esté cerrada más grandes serán las obras que necesita y menores garantías de que vuelva a ser puesta en marcha", ha aseverado.
Y es que Ruiz ha confesado que un hipotético cierre de la que ha calificado como "la joya de la corona" de las residencias de la Diputación de Soria supondría para ella un mazazo. "Siendo además mi pueblo, me duele, no ya como vicepresidenta ni como consejera, sino como una vecina más de Ágreda, de ahí mi disposición a buscar y ayudar a buscar soluciones para mantener en funcionamiento esos servicios sociales que, repito, no benefician únicamente a los vecinos de la localidad".
Al respecto, la representante de la Junta sugiere a Pardo que si lo que necesita es dinero para sufragar las obras de remodelación puede solicitar la colaboración económica de la Administración autonómica, algo que ya se ha hecho en otros muchos centros residenciales, a la vez que le ha invitado a buscar otro tipo de soluciones para la gestión del centro.
"No es lo mismo concesión que privatización, no es lo mismo un centro con todas las plazas privadas a tener una residencia que dispongan también de plazas públicas para aquellas personas con pensiones muy pequeñas", incide Ruiz, no sin antes volver a mostrar sus temores respecto de las verdaderas intenciones de la Institución provincial soriana cuando anuncia un cierre de Sor María de Jesús para ejecutar una de remodelación "que carece de proyecto terminado y sin obras licitadas".