La caída con la moto en un día de lluvia se produjo en la A-6, en Villardefrades, al pasar por una señal horizontal pintada en la vía
VALLADOLID, 14 Abr. (EUROPA PRESS) -
El Ministerio de Transportes, Movilidad y Agencia Urbana deberá indemnizar a un motorista de la Guardia Civil de Tráfico de Valladolid con 104.500 euros por las lesiones, secuelas y perjuicio patrimonial como consecuencia de un accidente4 registrado en abril de 2020 en la carretera A-6, dentro del término municipal de Villardefrades, en el que el agente resultó gravemente herido como consecuencia del mal estado de la vía a causa de la lluvia.
Su motocicleta Yamaha FJR 1.300 resbaló por una señal horizontal en la calzada que había sido repintada, algo no permitido, ya que la normativa obliga retirar la capa existente, de ahí la sentencia de la Sala de lo Contencioso de la Audiencia Nacional que estima el recurso del agente ante la resolución denegatoria del Ministerio de Transportes de julio de 2022, según la información del Diario de Valladolid El Mundo recogida por Europa Press.
El agente, en su primera reclamación ante el Ministerio expuso que solicitaba indemnización por los daños personales derivados del accidente sufrido el día 10 de abril de 2020, sobre las 17:03 horas, estando de servicio como agente de la Guardia Civil de Tráfico. En concreto, se encontraba de patrulla conduciendo la motocicleta Yamaha 1.300 por la Auto vía A-6, cuando a la altura del kilómetro 212,770 (Villardefrades) se produjo la caída de la motocicleta sobre el asfalto y la de su conductor, que impactó fuertemente contra la calzada.
El siniestro se produjo al estar la calzada mojada por la lluvia, concretamente, por el deslizamiento del neumático anterior sobre la superficie de una señal horizontal consistente en una flecha blanca pintada en la calzada, que señaliza el ramal de salida hacia la derecha, junto a un carril de deceleración.
Reclamaba en vía administrativa la cantidad de 104.517,98 euros e imputaba la responsabilidad a la Administración, por haber incumplido sus obligaciones de conservar y mantener las carreteras abiertas a la circulación en condiciones tales que la seguridad de quienes las utilicen esté normalmente garantizada.
Concretamente, alegaba como causa del accidente un evidente defecto de mantenimiento de la vía, puesto que el contacto del neumático con la flecha blanca de dirección, al estar repintada en varias capas y con el pavimento mojado por la lluvia, redujo de forma drástica el coeficiente de rozamiento, de modo que el reclamante no pudo evitar la caída de la motocicleta.
En la sentencia, la AN da ahora la razón al guardia reclamante, con matices: "No concurriendo base probatoria que permita apreciar una conducta incorrecta o imprudente por parte del agente accidentado, motorista experimentado, con muchos años de servicio, que se encontraba prestando servicio en una zona conocida para él, aun cuando la señal horizontal cumpliese todas las normas de aplicación, sí resulta apreciable en el presente caso la existencia de un daño antijurídico que la persona accidentada no tenía el deber de soportar", finaliza.