Reclama aclarar aspectos como el control del cumplimiento contractual
ANDORRA LA VELLA (ANDORRA), 29 Oct. (EUROPA PRESS) -
La Confederación Empresarial Andorrana (CEA) ha pedido la convocatoria de un consejo económico y social extraordinario para tratar la "necesaria" regulación del teletrabajo, según se expone en un comunicado de prensa emitido este jueves por la patronal.
La petición responde al anuncio hecho este miércoles por el Gobierno andorrano de endurecer las medidas de contención del Covid-19, que incluye la obligatoriedad de teletrabajo siempre que no se pueda justificar la presencia física a partir del lunes.
Para la CEA, esta regulación del teletrabajo debe incluir "normas claras a la hora de determinar quién puede y quién no puede teletrabajar, en función de la naturaleza de la actividad, de las condiciones del lugar de trabajo y de la estructura organizativa de cada empresa".
Así, la patronal considera que "se deberían articular y clarificar los mecanismos que hacen posible el control del cumplimiento de las condiciones contractuales, en lo relativo a horarios de trabajo y logro de objetivos, entre otros".
En su opinión, el teletrabajo genera preocupaciones que se deberían resolver por la vía de la regulación, como "el tratamiento de los datos "de naturaleza sensible o confidencial en un entorno --como son los domicilios particulares-- que no siempre cumple requisitos equivalentes a los de un centro de trabajo".
Otras preocupaciones de los empresarios son "la regulación de los accidentes o enfermedades relacionadas con la actividad laboral o el uso del material necesario para desarrollar la actividad".
DECLARACIONES DEL PRESIDENTE DE LA PATRONAL
El presidente de la CEA, Gerard Cadena, ha manifestado que entienden que está "en manos de todos hacer el posible para reducir la curva de contagios y mantener, a la vez, las actividades económicas".
A la vez, ha pedido que la regulación garantice la productividad y el mantenimiento de unas condiciones laborales óptimas: "Tenemos que entender que la gran mayoría de empresas de nuestro país están concebidas para el trabajo presencial y que, actualmente, no disponemos de un marco normativo claro que regule esta situación", concluye.
