La marcha ha sido convocada por colectivos vinculados a la escuela concertada
BARCELONA, 20 Dic. (EUROPA PRESS) -
Alrededor de 400 vehículos, según la Guardia Urbana, han recorrido este domingo por la mañana la avenida del Parallel de Barcelona para protestar contra la nueva ley de educación --conocida como la 'Ley Celaá'-- y en defensa de la escuela concertada.
Han avanzado en una marcha lenta organizada por 'Més Plurals', que aglutina sindicatos, asociaciones de familias, empresas y organizaciones educativas del sector de la escuela concertada.
En declaraciones a Europa Press, el presidente de la Federació d'Associacions de Pares i Mares d'Escoles Lliures de Catalunya (Fapel), Josep Manuel Prats, ha explicado que los asistentes han "cantado, bailado y reivindicado" la pluralidad, la libertad y la igualdad en la enseñanza, con globos y pancartas.
La marcha se ha celebrado de forma pacífica y sin ningún incidente, y también han acudido personas del mundo de la escuela pública que no están de acuerdo con los fundamentos de la ley, ha detallado Prats.
Los vehículos --sobre todo coches pero también bicicletas y motos-- se han concentrado a las 11 de este sábado en la avenida Maria Cristina para recorrer después la avenida del Parallel.
Luego han llegado hasta la plaza del Carbó y han regresado al punto de inicio, donde se ha leído el manifiesto que ha cerrado el acto, sobre las 13.00 horas.
MANIFIESTO
En el manifiesto, los organizadores han lamentado que en plena pandemia se haya tramitado una ley de forma "'exprés' en la que, por primera vez, se ha vetado la participación de la sociedad civil" y que el Gobierno ha querido imponer, a su juicio.
"La LOMLOE tiene una gran carga ideológica, que restringe duramente derechos y libertades individuales y colectivas. Atenta contra la libertad de educación porque propone una drástica reducción del pluralismo y del derecho a escoger de las familias", ha afirmado 'Més plurals'.
La plataforma rechaza la ley, que considera que relega la educación de iniciativa social a un papel "absolutamente subsidiario en relación con la enseñanza pública", porque la programación de la red de centros y la oferta de plazas escolares se hará sin tener en cuenta lo que solicitan las familias, han mantenido.
"Deseamos una educación pública plural y de calidad, pero eso no se consigue legislando contra la enseñanza concertada", y han reclamado al Gobierno garantizar los recursos para los centros ordinarios y de educación especial, además de respetar los acuerdos internacionales sobre la asignatura de religión.
