BARCELONA 3 Sep. (EUROPA PRESS) -
Los alumnos catalanes que enfermen por gripe A durante el curso en Catalunya deberán volver a la escuela 24 horas después de desaparecer los síntomas de fiebre, según recomienda el protocolo elaborado por las consellerias de Salud y Educación de la Generalitat para hacer frente a la nueva gripe.
El documento, presentado hoy a la comunidad educativa, pide especialmente a los niños de guarderías y centros de Infantil permanecer en casa al menos siete días tras la aparición de los primeros síntomas y regresar 24 horas después de la desaparición de los síntomas.
También pide que los estudiantes reduzcan el contacto con las personas sanas y continuar extremando las medidas higiénicas al volver porque durante diez días después de sufrir la enfermedad puede seguir existiendo riesgo de contagio.
La Generalitat recomienda asimismo cubrirse la boca y la nariz con pañuelos de papel de un solo uso al estornudar, mantener las manos limpias y lavarlas con agua y jabón durante unos 20 segundos, y no acercarlas cuando estén sucias a las mucosas de los ojos o de la nariz.
Además, pide que se ventilen las aulas durante 15 minutos cada día, limpiar y desinfectar regularmente las superficies duras --en el caso de las guarderías limpiar los juguetes comunes--, y evitar compartir cubiertos.
El protocolo no considera necesario que el personal y los alumnos en contacto con infectados deban ponerse en cuarentena, pero sí pide informar a las familias cuando se confirme algún caso.
Si la falta de asistencia a las aulas es "superior a la habitual", se piden seguir las recomendaciones que se decidan entre las áreas básicas de salud, las regiones sanitarias y las unidades de vigilancia epidemiológica.
Asimismo, se recuerda que los niños con enfermedades crónicas como asma, diabetes, cardiopatías, metabolopatías y neuropatías son un grupo de "riesgo", por lo que asegura que ellos, juntos a los adultos con estas enfermedades y las mujeres embarazadas, serán el primer segmento de población a vacunar, tal y como decidió el Consejo Interterritorial del Sistema nacional de Salud (CISNS).
El protocolo pide tener en cuenta que la evolución epidemiológica del virus de la gripe A es "impredecible" y por tanto las recomendaciones del documento pueden modificarse en un futuro. Además, recuerda que no hay evidencia científica para decir que el cierre de las escuelas puede ser una medida eficaz para disminuir la transmisión de la nueva enfermedad.