Hereu advierte a Alberto Fernández (PP) de que la firmeza ante los vándalos es la unidad
BARCELONA, 1 Oct. (EUROPA PRESS) -
El pleno del Ayuntamiento de Barcelona ha aprobado este viernes convocar la Junta de Seguridad Local y el Consejo de Seguridad Urbana para consensuar líneas de actuación que eviten altercados como los que se produjeron en la capital catalana en la jornada de huelga general del miércoles, coincidiendo con la desocupación de la ex sede del Banesto situada en la plaza de Catalunya.
Según los cálculos iniciales del Ayuntamiento, los daños de los altercados en mobiliario urbano y el coche de la Guardia Urbana quemado ascienden a 265.000 euros. El 40% de los 43 detenidos por los incidentes tiene antecedentes, y la mayoría tiene entre 18 y 25 años.
El bipartito, que forman PSC e ICV-EUiA, y CiU han transaccionado una proposición que ha apoyado ERC, y el PP se ha abstenido. El texto condena los actos vandálicos aprovechando el día de huelga, y apoya a los cuerpos de seguridad y emergencias. Además, confirma que el consistorio se personará como acusación particular, pedirá compensaciones y acompañará a quien se persone.
Los grupos han tumbado una moción sobre el mismo tema del PP, que ha apoyado CiU, que pedía a la Justicia la máxima celeridad en los desalojos de los edificios okupados, después de que la desocupación de la ex sede del Banesto coincidiera con la huelga, y ayudas económicas para los comercios y particulares afectados. Entre otros, fue saqueada la tienda Levi's del paseo de Gràcia.
Alberto Fernández Díaz (PP) ha justificado su abstención a la propuesta aprobada por "aquello que no incluye" y ser políticamente correcta y "a medida" de ICV-EUiA. Además, ha dudado de que con la proposición los okupas, antisistema y violentos "hagan el petate, aten el perro y se vayan fuera de Barcelona". Para él, debe "desocuparse Barcelona de okupas".
Pese a que "no hay varitas mágicas" para mantener el orden público, el alcalde, Jordi Hereu, ha pedido una respuesta unitaria de los grupos ante los vándalos, "delincuentes" a quienes ha acusado de ir contra Barcelona y de mantener actitudes "totalitarias".
"No querría que vieran en nosotros una grieta de división por no sé qué táctica política", ha advertido, sentenciando que "la mejor firmeza es la unidad". Ha agregado que Fernández Díaz y él saben "qué quiere decir sufrir el efecto" de grupos vandálicos porque los apuntan desde sus páginas webs, ante lo que ha insistido en lamentar la falta de unidad.
La tercera teniente de alcalde de Seguridad, Assumpta Escarp, ha dicho que las juntas de seguridad servirán "no sólo para profundizar en la colaboración policial, que ya se hace con el trabajo conjunto, sino también en la colaboración de los órganos judiciales", tras la polémica sobre si el Juez debería haber permitido desalojar antes la ex sede del Banesto ocupada el sábado.
119 DESOCUPACIONES ESTE AÑO
Hereu ha defendido que el consistorio actuó con eficiencia en este caso, en un año en que ya se han ejecutado 119 desocupaciones. "No pasó ni una hora que di órdenes para identificar al propietario del inmueble", ha afirmado. Escarp ha concretado que una vez localizado, el Ayuntamiento lo acompañó el domingo a denunciar, pero el juez decidió no desalojar.
Según la responsable de Seguridad, "Barcelona no es de ninguna manera la capital antisistema", y ha repasado las sentencias dictadas contra los vandálicos, que son "una manera de decir que en Barcelona no hay impunidad". El consistorio se ha presentado en 123 causas, de las cuales ha ganado 72 con condenas. La última: tres años y seis meses de cárcel por el botellón de 2006.
CiU NO DA CHEQUE EN BLANCO
Desde CiU, Xavier Trias ha reclamado a Hereu que "no saque el botafumeiro" cantando alabanzas de cuando era concejal de Seguridad, desde cuando el alcalde ha dicho en el pleno que afronta a los okupas, ya que "Barcelona se ha convertido en un referente de los antisistema. Ha admitido que le ha costado acordar la proposición, y ha advertido al bipartito que "no es un cheque en blanco".
Jordi Portabella ha defendido que ERC fue la única en condenar "sin paliativos" el uso de la violencia en las celebraciones de julio con motivo de la victoria de la Selección Española en el mundial de fútbol, ante lo que ha advertido de que se abren grietas sin una respuesta unitaria. "Ya basta; Barcelona es ciudad de delincuencia, no de violentos", ha zanjado.
El presidente de ICV-EUiA y segundo teniente de alcalde, Ricard Gomà, ha lamentado que los vándalos aprovechasen la huelga para "camuflar" acciones violentas, y ha reclamado que no se utilicen para tapar el éxito del 29-S. Según él, se debería estar hablando de cómo el Gobierno central rectifica y sale del "callejón neoliberal sin salida donde se ha metido de la mano de CiU".
