Carod avisa de que "no es hora de escisiones" en la política catalana

ep
Actualizado: jueves, 13 mayo 2010 21:56

PALMA DE MALLORCA / BARCELONA, 13 May. (EUROPA PRESS) -

El vicepresidente de la Generalitat, Josep Lluís Carod-Rovira, advirtió hoy que "no es hora de escisiones ni de más fragmentaciones" en el mapa político catalán, sino todo lo contrario.

El reto que tiene ahora el catalanismo, sostuvo Carod (ERC), es "extender la conciencia nacional y el sentido de pertenencia, ensanchar la base, y no radicalizar a los convencidos".

Lo dijo en una conferencia en Palma, bajo el título 'Adiós al Nacionalismo. Viva la nación', en la que admitió que más allá de las próximas elecciones y de sus resultados y de los partidos políticos, "hay un espacio amplísimo --de ciudadanos-- que será necesario compactar y reunir en el futuro, un espacio de complicidades y tendencias".

Lo que está claro, dijo, es que "un país se construye desde todas las ideologías democráticas" por lo que no puede ser que todos los catalanistas sean considerados conservadores, y todos los independentistas de izquierdas.

Según Carod, en la sociedad catalana habrá "cambios profundos, y cada uno deberá asumir sus responsabilidades en su espacio ideológico".

Consideró que ha habido un aumento del independentismo en Catalunya, por lo que a día de hoy se trata de un movimiento transversal, que no se corresponde a un único partido político en concreto. Por ello, pidió que ninguna fuerza política trate de tener el monopolio del soberanismo.

"No se trata de construir una sociedad sólo para los ciudadanos nacionalistas, una parte, sino para los ciudadanos de la nación, todos los nacionales, el todo", dijo Carod, quien volvió a explicar por qué prefiere definirse como nacional y no como nacionalista.

También dijo que el motor de la construcción de Catalunya no puede ser la "nacionalista, agotadora y frustrante obsesión antiespañola" ya que no hay que buscar un enemigo a quien descargar las culpas, sino centrar las objetivos en lograr el objetivo: la libertad.

Otro de los retos que hay que asumir es que Barcelona asuma sin complejos "el liderazgo de la nación", y al mismo tiempo, buscar referentes identitarios territoriales más allá de la conurbación metropolitana y de la Catalunya Vella.