BARCELONA 11 Oct. (EUROPA PRESS) -
Los sindicatos CC.OO. y UGT han acusado al Govern de "condenar" a la pobreza y la exclusión social a los parados con los recortes de la renta mínima de inserción (RMI), y han reclamado la implantación de la renda garantizada para la ciudadanía (RGC) que atienda a quiénes hayan agotado todas sus prestaciones por desempleo.
Durante la Comisión de Bienestar Social y Familia del Parlament, la secretaria de socioeconomía de CC.OO., Cristina Faciaben, ha recordado que más del 28% de las personas en paro no tienen ningún tipo de cobertura social por desocupación y ha añadido que si se las excluye de la RMI tal y como prevé el nuevo decreto "se las empujará a la miseria".
Faciaben ha añadido que "ahora es el mejor momento" para implementar la RGC como derecho de ciudadanía, contemplado en el Estatut de Autonomía, y ha considerado que mientras no se implante esta nueva renda, la RMI debe mantener el soporte a los desempleados que han agotado el subsidio.
Por su parte, la secretaria de políticas sociales de UGT, Raquel Gil, ha lamentado que el Govern no haya consensuado los cambios de la RMI con los trabajadores sociales y haya optado por contratar una empresa de ocupación temporal para revisar los expedientes, añadiendo que el ejecutivo de CiU "ha dejado clara su falta de sensibilidad social".
Según ha avanzado Gil, el comité de seguimiento de la RMI no se ha reunido ni una sola vez desde la nueva legislatura, y ha asegurado: "Aunque los sindicatos hemos mostrado nuestra predisposición para consensuar los cambios, el Govern ha preferido actuar de forma egoísta".