CERDANYOLA DEL VALLÈS (BARCELONA), 3 Oct. (EUROPA PRESS) -
El grupo de CiU en Cerdanyola ha descartado este lunes impulsar o apoyar una eventual moción de censura después de que sus tres concejales fueran expulsados el viernes del gobierno municipal, formado por Compromís per Cerdanyola y ERC, por votar diferente en dos puntos del orden del día del pleno de septiembre.
Así lo ha expresado el portavoz de la formación, Josep Grau, ante los medios, tras señalar que esta opción "no está en la hoja de ruta", y que no han provocado esta situación para llegar a este escenario porque su propósito era seguir en el consistorio.
Según Grau, el motivo de la ruptura es que los otros dos socios del equipo municipal no quisieron abordar las diferencias desde el diálogo, y que el alcalde, Carles Escolà (Compromís per Cerdanyola), les advirtió de que si no votaban en sintonía con el gobierno municipal les destituiría.
Así, ha asegurado que "en todo momento se informó de la posición que se tomaría" en referencia a los dos puntos del plenario, que hacían referencia a la destitución de una técnica municipal y a la renuncia de la instalación de un crematorio en la localidad.
Por ello, ha defendido que CiU ha sido "muy generosa" con cero cargos de confianza y puestos de representación en organismos supramunicipales como el Área Metropolitana de Barcelona (AMB), pero que ahora van a ser oposición, desde donde espera que haya un diálogo que, a su juicio, se le ha negado dentro del Ayuntamiento.
PÉRDIDA DE OPORTUNIDADES
El concejal de CiU Marc Costa, que era responsable, entre otras áreas, de la económica en la administración, ha dicho que Cerdanyola ha dejado escapar oportunidades "por motivos políticos", como una inversión de cinco millones de euros del Fondo Europeo de Desarrollo Regional (Feder) por un proyecto de transferencia del conocimiento al mundo local, en el que la Universitat Autònoma de Barcelona tenía protagonismo, y se había acordado presentar juntamente con Rubí y Sant Cugat del Vallès (Barcelona).
Según Costa, dos días antes el alcalde lo frenó, y ha señalado antes de acabar el año se deberán pronunciar de cara a una segunda convocatoria para 2018.
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