BARCELONA, 27 May. (EUROPA PRESS) -
El Museu Picasso de Barcelona muestra, por primera vez, la "fagocitación" que hizo el artista malagueño de la figura de Santiago Rusiñol, al ser un reconocido artista barcelonés, que había sido todo un referente de vanguardia en la ciudad, mientras que Picasso era sólo un estudiante que empezaba su carrera.
Con la exposición 'Picasso Vs. Rusiñol', desde mañana y hasta el 5 de septiembre, los visitantes podrán ver cómo aquel joven Picasso versiona, fusiona y descontextualiza las obras de Rusiñol, hasta el punto de retratar al autor de 'L'auca del Senyor Esteve' como 'El caballero de la mano en el pecho', de El Greco, del que Rusiñol fue gran defensor.
Durante cuatro años, Picasso hizo 21 retratos de Rusiñol, de los que se muestran 11 en el Museu Picasso --uno está presente pero no se ve, porque está hecho en el reverso de un cuadro-- y, aunque había otros artistas consagrados "mucho más dotados" que Rusiñol, Picasso se fija en él porque le interesaba más convertirse en un artista que aprender una técnica, comentó el comisario de la exposición, Eduard Vallès.
Al conocerse, Rusiñol tenía 33 años y Picasso, 13. El primero ya había tenido su gran momento, mientras que el segundo aún estaba por despuntar. Su relación evolucionó hacia un alejamiento teñido de burla y sátira, como demuestra el último retrato, el escatológico 'La Gloria-Crítico/a', en la que Rusiñol es sodomizado por un crítico mientras alcanza la gloria.
La ruptura con Rusiñol coincide con el segundo viaje de Picasso a París, entre junio de 1901 y enero de 1902, tiempo en que hace una gran exposición que gusta mucho a la crítica francesa, conoce a nuevos artistas y descubre nuevas inquietudes.
"La Barcelona que le impresionó en comparación con Málaga se había convertido en una ciudad que ya no le interesaba", comentó Vallès, quien apuntó que el pintor, además, relacionaba totalmente a Rusiñol con Barcelona. "Pese a todo, tuvieron una relación cordial toda la vida", apostilló.
OBRAS SUCULENTAS
Según Vallés, la muestra recoge obras que nunca antes se habían expuesto y son de gran valor artístico en la trayectoria de Picasso, como el dibujo que hizo para acceder a la escuela de bellas artes de La Llotja, propiedad de la familia. "Si tuviésemos dinero tendríamos que comprarla", avisó el comisario.
La muestra está coproducida por el Museu Picasso y el Museu Cau Ferrat de Sitges (Barcelona), fundado en su momento como taller-museo por Rusiñol, que también frecuentaba mucho las tertulias de Els Quatre Gats. Actualmente, el Cau Ferrat está cerrado hasta el otoño de 2012 por obras de restauración.
Entre las actividades paralelas a la muestra que se organizan destacan unas visitas guiadas por los artistas Perejaume y Joan Fontcuberta, que analizarán la exposición desde la mirada del arte contemporáneo y la fotografía, respectivamente.
