BARCELONA, 8 Dic. (EUROPA PRESS) -
Las estaciones de esquí catalanas han recibido menos afluencia de la prevista durante el puente de la Constitución debido a las condiciones meteorológicas adversas que han azotado el Pirineo desde el lunes.
Las elevadas temperaturas, la lluvia y la humedad han sido las principales causas de la menor asistencia de esquiadores, según han asegurado este miércoles fuentes de las estaciones a Europa Press.
La mayoría de las estaciones del Pirineo catalán empezaron el puente con cerca del cien por cien de las pistas abiertas, como auguraban las previsiones, pero desde el lunes han cerrado varias de ellas al no haber un grueso de nieve suficiente.
Es el caso de estaciones como La Molina (Girona), que el sábado abrió con 32 pistas operativas y este miércoles sólo cuenta con 16. También ha ocurrido en Vallter 2000 (Girona) y Port del Compte (Lleida), que empezó el puente con 25 pistas abiertas, de las que este miércoles sólo permanecen operativas cuatro.
Baqueira Beret, situada en la Val d'Aran, ha sufrido menos las consecuencias del clima, ya que sólo se ha visto obligada a cerrar unos 15 kilómetros de los 110 con los que abrió el sábado.
Lo mismo ha ocurrido con las estaciones de Port Ainé y Espot (Lleida), que han mantenido abiertas aproximadamente el cien por cien de sus pistas durante todo el puente, y han recibido, conjuntamente con la estación de Tavascan, 13.500 esquiadores.
El clima tampoco ha perjudicado a las estaciones andorranas, como en el caso de Vallnord, que a pesar de reconocer que a partir del lunes se ha experimentado un aumento de las temperaturas, no han tenido que cerrar pistas.
BAQUEIRA, LA MÁS CONCURRIDA
En cuanto a la afluencia de esquiadores en las estaciones catalanas, Baqueira Beret ha sido la más concurrida, con 55.000 usuarios, seguida por la Masella (30.000) y la Molina (20.000). Las estaciones de Vall de Núria y Vallter 2000, de menor tamaño, han recibido 2.000 y 4.000 esquiadores respectivamente.
A pesar de los efectos del clima, las estaciones han hecho un balance positivo del puente. "Estamos contentos", han asegurado fuentes de Vallter 2000, destacando que "no se puede hacer nada contra el tiempo".