TARRAGONA, 20 Sep. (EUROPA PRESS) -
El titular de la Sección Segunda de la Audiencia de Tarragona ha condenado a 45 años, un mes y 15 días de prisión a Jorge R.G. por el atraco con arma y rehenes del pasado 8 de noviembre en la sucursal de Caixa Tarragona situada en la Rambla Vella de la ciudad.
El juez condena al acusado a tres años, un mes y quince días de cárcel por el delito de robo con intimidación con utilización de instrumento peligroso en grado de tentativa y con reincidencia. También entiende que concurren siete delitos de secuestro y, tal como solicitaban la Fiscalía y la acusación particular, se le condena a una pena de seis años más por cada uno de ellos.
El juez rechaza en su sentencia todos los argumentos del acusado para justificar su acción y considera que el atraco se realizó "con el propósito de obtener un ilícito beneficio patrimonial". De hecho, basa su argumentación en la contradicción que hubo durante la vista oral y la instrucción, cuando el procesado afirmó que adquirió el arma "sin pensárselo mucho" y se dirigió a la sucursal "para pedir dinero y marcharse", sin mencionar en ningún momento que quisiera comprar metadona, como manifestó durante la vista oral.
Sobre la compra del arma, una pistola de aire comprimido, el juez afirma que "no tiene credibilidad alguna" que la comprara para regalársela a un familiar, que fue la versión que dio Jorge R.G. durante el juicio.
Por otro lado, el juez también admite la calificación de las acusaciones que la liberación de los rehenes se produjo después que el atracador tuviera la promesa de la Policía de conseguir metadona, y "no de modo espontáneo" como declaró el acusado.
Según la sentencia, con su actuación, el atracador "pretendía anular la voluntad" de los rehenes y "mermar" su capacidad de decisión, con la finalidad de que fueran satisfechas sus pretensiones. La presencia policial, sin embargo, precipitó los acontecimientos, según entiende el magistrado, quién añade que el acusado no consiguió sus propósitos.
Respecto el atenuante de toxicomanía que solicitaba la defensa, se rechaza de acuerdo con la declaración del policía negociador que manifestó que el acusado estaba nervioso pero no con síndrome de abstinencia, así como también de los forenses que determinaron que el acusado no tenía las facultades alteradas por las drogas.
RETENIDOS UNA HORA Y MEDIA.
Los hechos sucedieron el pasado 8 de noviembre alrededor de las 14 horas cuando el acusado entró con una pistola simulada, que había comprado días antes en Lleida, en la sucursal e hizo siete rehenes a los que retuvo durante una hora y media. Al director de la entidad lo encañonó apuntándole en la nuca. Por su parte, las cajeras del banco ofrecieron al atracador 100 euros, pero éste los rechazó.
El atraco terminó, tras la negociación con la Policía, con la rendición del detenido hacia las 15.20 horas. Se da el caso, que el hombre había quebrantado un permiso del centro penitenciario de Lleida donde cumplía condena.
