BARCELONA, 18 Feb. (EUROPA PRESS) -
El Consejo de la Profesión Médica de Catalunya presentará mañana, lunes, sus primeras conclusiones entre las que destacan la falta de médicos en la sanidad catalana, principalmente especialistas, así como una creciente fuga de licenciados hacia el extranjero en busca de salarios más altos.
En declaraciones a Europa Press, el presidente del Colegio de Médicos de Barcelona, Miquel Bruguera, explicó que el déficit de profesionales es generalizado, pero afecta en mayor medida a especialistas anestesistas, pediatras, radiólogos y ginecólogos, especialmente, en hospitales pequeños alejados de Barcelona.
Según Bruguera, quien preside una de las comisiones del Consejo, Catalunya adolece de una falta de médicos porque tiene un "modelo muy generoso" para con el ciudadano, pese a que goza de una de las medias de médico por número de habitante más altas de Europa.
Por otro lado, el informe también revela que un "cierto número" de médicos jóvenes formados en Catalunya está migrando a países con salarios más altos. En concreto, 120 médicos solicitaron en 2005 la baja del Colegio de Médicos de Barcelona para trasladarse al extranjero, confirmó Bruguera.
Por lo que respecta al número de médicos que dejan Catalunya después del MIR, de los 413 que comenzaron la residencia en 2000 un 2,9% se fueron al extranjero y el 8,5% a otras regiones españolas. El resto se quedó en Catalunya, según datos del Colegio.
MÁS MÉDICOS EXTRANJEROS.
El 33% de los médicos que se dieron de alta en el Colegio Oficial de Médicos de Barcelona (COMB) durante el pasado año era de origen extranjero, principalmente latinoamericanos y también de la Europa del Este.
Según Bruguera, en la última década se ha registrado una nueva tendencia con respecto a la procedencia de los "nuevos colegiados". Se trata de profesionales que han nacido en el extranjero, pero que han estudiado en Catalunya. En concreto, el 10% de los mismos disponen de la doble nacionalidad.
Ante el creciente número de facultativos de origen foráneo que trabajan en la sanidad catalana, aseguró que "no se puede constatar" una merma de la calidad asistencial, aunque exista un "riesgo potencial".
En cualquier caso, Bruguera se mostró partidario de que los médicos extranjeros llegados a España superen unas pruebas que "acrediten" su validez. Según detalló, estas pruebas deberían evaluar conocimientos médicos, antropológicos, así como de idioma, tanto catalán como castellano, dijo.
