BARCELONA, 24 May. (EUROPA PRESS) -
El conseller de Política Territorial y Obras Públicas de la Generalitat, el socialista Joaquim Nadal, negó hoy que haya tenido contactos con los ex altos cargos de la Generalitat Macià Alavedra y Lluís Prenafeta, imputados por el 'caso Pretoria' de corrupción urbanística.
Según informó hoy 'El Periódico de Catalunya', los dos ex dirigentes de CiU presumían de hablar con él y con el conseller de Economía, Antoni Castells (PSC), para sortear problemas administrativos y burocráticos, según decían en conversaciones telefónicas. El sumario constata que Prenafeta y Alavedra buscaban "voluntades en el ámbito político y público" a favor del resto de miembros de la trama, y cobraban comisiones por eso.
En declaraciones a Catalunya Ràdio recogidas por Europa Press, Nadal afirmó que nunca le pidieron una sugerencia ni comentario sobre ninguna obra pública, y añadió que esa misma transparencia es la que exige a las "entre 600 y 1.000 visitas concertadas" que recibe anualmente en el departamento de alcaldes, concejales, promotores inmobiliarios, constructores, propietarios de terrenos y responsables de ingenierías.
Dijo que habla con todos ellos de sus situaciones empresariales, pero "la frontera es la ley, y, evidentemente, no hay tratos de ningún tipo".
Al preguntársele si ha entrado en su despacho algún imputado por este caso, dijo no recordar ninguna visita reciente, aunque "alguno debe de haber pasado". El conseller afirmó, por ejemplo, que los planes que aprueban los alcaldes para sus municipios deben pasar por el departamento, sin que suponga ningún trato de favor.
Nadal explicó que, "por educación", saluda o se pone al teléfono si le llaman personas que trata desde hace tres décadas por los cargos que habían ocupado en los gobiernos de Jordi Pujol. Sobre Alavedra, por ejemplo, recuerda haberlo visto en espectáculos en Girona, pero aseguró: "No creo que nadie pueda deducir de esto que, en sus contactos, hubiera la pretensión de hacer operaciones; y menos, vinculadas con este caso".
También destacó que, una vez levantado el secreto de sumario, queda claro que los implicados vinculados al PSC querían actuar a escondidas de la dirección del partido: "Debían de pensar que hacían algo que no se podía saber".
El PSC, pues, fue "de una contundencia radical; tanto, que, una vez imputadas estas personas, no acusadas ni aún condenadas, han tenido que renunciar a su militancia y a sus cargos públicos", como el ya ex alcalde de Santa Coloma de Gramenet (Barcelona) Bartomeu Muñoz.
