Dos sindicatos de Mossos piden por carta a Montilla una mesa de diálogo para pactar medidas

BARCELONA 3 Jun. (EUROPA PRESS) -

Los sindicatos de Mossos d'Esquadra SPC y CAT-ME entregaron hoy una carta dirigida al presidente de la Generalitat, José Montilla, para trasladarle que consideran "injusta" la decisión de recortar el sueldo a los funcionarios, aunque admiten que es "inevitable", y le pidieron que convoque una mesa de diálogo para pactar cómo se aplicarán las medidas al cuerpo policial.

Delegados sindicales de estos dos sindicatos, así como del Er.N.E., de la Ertzaintza; el SPF, de la Policía Foral de Navarra; de la Coordinadora de Policías Locales y del Sindicato Unificado de Policía (SUP), así como con el apoyo de la AUGC, de la Guardia Civil, se concentraron al mediodía en plaza Sant Jaume contra estas medidas para reducir el déficit.

Durante la protesta, que congregó a decenas de delegados, el secretario general del CAT-ME, Jordi Costa, explicó que han trasladado al secretario general adjunto de Presidencia, al entregar la carta, la petición de constituir la mesa para que si finalmente les bajan el sueldo, se pacten otras medidas que contrarresten esta reducción.

Sus principales peticiones para la negociación es que se revise su jornada anual, que es "de las más largas" de los trabajadores públicos, y el régimen de incompatibilidades. Costa explicó también que utilizarán la vía jurídica porque en la medida de los recortes hay aspectos que creen que son "alegales". "No nos pararemos aquí, seguro", apostilló.

El secretario general del SPC, David José, lamentó que los Mossos "hacen más horas que nadie", por lo que quieren que se revise su jornada anual. "Nos hubiera gustado hoy un compromiso para la mesa de negociaciones", agregó.

CONSIGNAS Y PITIDOS

Los sindicalistas portaban una pancarta con el mensaje: 'Policía contra el recorte salarial' y corearon consignas contra el Gobierno y contra las medidas de austeridad: 'Seguirá el calvario, nos bajan el salario', y 'Con este Gobierno vamos de culo', además de lanzar pitidos.

El secretario general del ER.N.E., Roberto Seijo, vio la medida "discriminatoria" contra la clase trabajadora y anunció nuevas acciones, la próxima previsiblemente en Pamplona, después de la de Bilbao la semana pasada, especialmente si las autoridades no se sientan a negociar para paliar los efectos.

Desde el Sindicato de Policía Foral, Benito Basterretxea, lamentó que cuando hubo "vacas gordas" les dijeron que no tocaba subir el sueldo y ahora que hay "vacas flacas" el sector público es el primero en sufrir el recorte. Quieren que "como mucho" les bajen el salario en torno al 2%, como a la Ertzaintza, y que sea "el menor impacto posible".

Luis Ignacio Martínez, del SUP, aseguró que hubieran entendido una congelación salarial debido a la situación económica del país, pero "los recortes son injustos", ya que el Cuerpo Nacional de Policía está "deprimido" porque hace tiempo que reivindica equiparar su sueldo con la policía autonómica, y ahora lo que tiene es una reducción salarial.

POR EL ESTADO DEL BIENESTAR

En la misma plaza Sant Jaume también se manifestaron delegados del SAP-UGT, que pasaron allí la noche, según aseguró su secretario general, José Gázquez. Están llevando una acción sindical propia para evitar "que se carguen el Estado del Bienestar" con las medidas antidéficit.

Hizo hincapié en que lo que quieren es que se anule el recorte, una medida "que nunca se ha dado en la historia de la democracia". Según él, se siente "engañados" por unas medidas "atípicas" que muestran un alto grado de improvisación.

Ayer el sindicato inició sus protestas con una acampada en la misma plaza Sant Jaume, donde plantaron dos tiendas, y que duró en total 10 minutos, ya que sus propios compañeros, agentes de los Mossos, les pidieron que las desmontaran.