BARCELONA, 9 Nov. (EUROPA PRESS) -
La tercera teniente de alcalde y responsable de Seguridad de Barcelona, Assumpta Escarp, ha explicado que el dispositivo de seguridad organizado por la visita del Papa Benedicto XVI a la ciudad para dedicar la Sagrada Familia se diseñó para responder al actual contexto internacional.
En declaraciones a Europa Press, Escarp ha comparado la visita de este fin de semana con la de Juan Pablo II en 1982, y ha asegurado que "en 2010 los requerimientos de seguridad mundiales son totalmente diferentes a los del 82, hay muchos más, lamentablemente".
Desde Barcelona, han tratado de responder a los requerimientos de seguridad para una visita de este tipo de las autoridades responsables del dispositivo, especialmente del Estado y del Vaticano, ha explicado la concejal.
Escarp ha asegurado que dimensionaron los recursos operativos para una afluencia de 400.000 personas porque previeron esta cifra a partir de las visitas del Papa en el 82, la visita de Benedicto XVI a Valencia y lo que preveía el Arzobispado.
"Más vale dimensionarlo para más gente que para menos", ha opinado, después de que finalmente asistieran 258.500 personas.
En el operativo siempre se intentó "minimizar todos los efectos", especialmente la movilidad, abriendo las calles tras pasar el papamóvil, por lo que finalmente los efectos negativos fueron mínimos.
Escarp ha asegurado que no se registró ningún altercado ni incidente destacado durante la visita.
