BARCELONA, 13 May. (EUROPA PRESS) -
El alcaldable del PSC por Barcelona y candidato a la reelección, Jordi Hereu, ha alertado del riesgo que supondría para la capital catalana un gobierno municipal de CiU y PP mostrando una foto del concejal nacionalista Xavier Trias con el ex presidente del Gobierno, José María Aznar.
"Esta es la alternativa y el cambio que algunos propugnan", ha advertido en su última intervención del debate entre alcaldables que han emitido este viernes TV3 y BTV, recordando el 'Pacto del Majestic', los acuerdos entre la CiU de Jordi Pujol y PP en 1996 que posibilitaron la investidura de Aznar.
Trias, por contra, se ha postulado como única alternativa viable ante un gobierno municipal liderado por el PSC, apelando al cambio y a un gobierno con talante y con ganas de "colaborar a mejorar la vida de la gente".
Alberto Fernández (PP) se ha reivindicado como única alternativa ante múltiples coaliciones que en su opinión perjudicarían a Barcelona: "El cambio no es ni más Hereu ni un tripartito ni la sociovergencia ni un acuerdo entre CiU y la ERC de Joan Laporta y otros grupos independentistas. El cambio debe ser nítido y en la buena dirección".
Jordi Portabella (UxB) ha apelado a la unidad del independentismo y ha asegurado que Barcelona debe aspirar a ser la punta de lanza de la reivindicación de un concierto económico, mientras que Ricard Gomà (ICV-EUiA) ha pedido el voto para combatir los recortes.
A lo largo del debate, Hereu ha negado en varias ocasiones datos que ponían sobre la mesa Trias y Fernández, y ha advertido del riesgo que implicaría para Barcelona un gobierno "neoliberal".
Mientras, Trias ha expresado su compromiso con el estado del bienestar, aunque en su opinión, no todo debe ser prestado directamente desde la administración, abriendo la puerta a los consorcios.
SEGURIDAD E INCIVISMO
Al abordar la seguridad, Fernández ha recibido críticas del resto de candidatos al alertar de que "en Barcelona, el delito es capital, jauja", lo cual atribuye a la permisividad de Hereu, quien le ha acusado de insultar a la ciudad.
Portabella ha aprovechado para retar a Trias si se negaría a pactar con quien tiene una visión apocalíptica de la ciudad: "En los temas de seguridad no coincido", se ha limitado a contestar el convergente.
Cuando el republicano le ha insistido, Trias no ha descartado acuerdos: "Tampoco estoy de acuerdo con usted en otras cosas; ni con Hereu,... Hemos de tener capacidad de tener mano tendida para Barcelona al día siguiente a las elecciones".
Cuando Fernández y Hereu se han enzarzado, Trias ha cortado diciendo que, sea como sea, hay mucha delincuencia y hacen falta muchos más guardias urbanos y mossos d'Esquadra.
De hecho, ha negado a Hereu que haya incrementado la Policía Local, y le ha acusado una vez más de falta de liderazgo; primero, por no mejorar la seguridad pese presidir la Junta de Seguridad Local; y en segundo lugar, porque no ha sabido entenderse con su propio socio de gobierno --ICV-EUiA-- al aprobarse la ordenanza de civismo.
Trias ha pedido prevención, en buena parte con guardia urbana de barrio, y en esa prevención ha coincido con UxB y con ICV-EUiA: por una parte, Gomà promete "más diálogo y prevención consiguiendo cohesión social", sin estigmatizar barrios.
Por otra parte, Portabella defiende políticas de conciliación y mediación en los barrios --si bien admite que falta policía--, y evitar así la reincidencia, de la cual responsabiliza en buena parte a los gobiernos de PP y PSOE.
El alcalde ha constatado ante sus contricantes que ha aportado más Guardia Urbana y coordinación con Mossos, y ha recordado que consiguió del Estado modificar el Código Penal.
