Jorge Fernández: "Si esto no es 'sociovergencia', que venga Dios y lo vea"

Actualizado: lunes, 27 diciembre 2010 20:53

Avisa a Mas que los catalanes no entienden que "pacte con el pasado", y al PSC que no se puede estar "en misa y repicando"

BARCELONA/MADRID, 27 Dic. (EUROPA PRESS) -

El vicepresidente tercero del Congreso y diputado del PP por Barcelona, Jorge Fernández Díaz, considera que el fichaje como conseller de Cultura del socialista Ferran Mascarell y el "cordial" traspaso de poderes que han protagonizado el nuevo presidente de la Generalitat, Artur Mas, y su antecesor José Montilla son una clara muestra de que existe un "pacto de gobernabilidad" entre CiU y el PSC. "Si esto no es 'sociovergencia', que venga Dios y lo vea", ha comentado.

En declaraciones a Europa Press, Fernández Díaz, que ha estado presente en la toma de posesión de Mas, ha destacado que, aunque no han firmado ningún documento, "se pongan como se pongan, es evidente que socialistas y nacionalistas han sellado un pacto de gobernabilidad", una maniobra que, a su juicio, no ha sido entendida por los catalanes.

Fernández Díaz, reconoce la legitimidad de ese pacto, pero está convencido de que hay muchos catalanes "entre desorientados y desencantados" que no comprenden por qué Mas "ha pactado con el pasado en lugar de con el futuro", cuando tenía un "mandato de los electores para mirar hacia delante y pasar página del tripartito".

DEBILIDAD Y DESORIENTACIÓN DEL PSC

También ha advertido a los socialistas catalanes de que "no se puede estar en misa y repicando". Y es que, en su opinión, el PSC, que sufre una "debilidad y una desorientación fortísimas", pretende "seguir gobernando y a la vez ser oposición". En este contexto, ha remarcado que es la primera vez que "quien era gobierno y pasa a ser oposición hace un pacto con quien le ha ganado".

"Y por si fuera poco --ha agregado-- ahora le coge consellers. Verde y con asas. No sólo pactan las políticas, sino que además ponen al frente de la Conselleria de Cultura, que tiene una gran importancia para el nacionalismo, a quien ya se ocupó de ese área en el tripartito de Pasqual Maragall y del Ayuntamiento de Barcelona".

Desde su punto de vista, esa alianza no despierta "entusiasmo" y, por eso, el acto de toma de posesión de Mas ha estado presidido por un ambiente de "preocupación contenida".

CONSECUENCIAS POLÍTICAS

Fernández Díaz ha avisado a CiU y PSC de que tendrán que "atenerse a las consecuencias políticas" de la sociovergencia porque después de pactar con los CiU, los socialistas no podrán presentarse como alternativa a los nacionalistas en Catalunya y a éstos les será imposible definirse como una "fuerza política decisiva para la alternancia en el Gobierno de España".

"En las elecciones municipales y generales recordaremos a los electores que si quieren votar socialista pueden hacerlo votando al PSC o a CiU porque son lo mismo", ha anticipado, a la vez que ha subrayado que el PP va a estar muy vigilante para ver cómo se traslada ese pacto a la política nacional.

"El PSOE y Zapatero están en caída libre y aliarse con quien está en caída libre tiene sus riesgos. Nosotros vamos estar muy atentos para ver cómo actúa CiU en Madrid y tomaremos buena nota", ha señalado Fernández Díaz, quien ha considerado que eso no será óbice para que, si es necesario, el PP mire a los nacionalistas tras las generales. Eso sí, ha recalcado que, igual que CiU ha pactado con los socialistas, también el PP tiene potenciales "socios alternativos".

En este contexto, ha recordado que los votos del PSC fueron decisivos para que Zapatero ganase las elecciones en 2004 y 2008 y que Catalunya volverá a ser decisiva en las próximas legislativas, con la diferencia de que ahora los socialistas "están hundidos". "Hay un deseo de cambio también en España y si CiU, en lugar de colaborar a esa alternativa se convierte en muleta de los socialistas, es evidente que la única alternativa somos nosotros", ha sentenciado.