BARCELONA, 21 Ene. (EUROPA PRESS) -
El Juzgado Penal número 8 de Barcelona ha absuelto al tercer procesado por los disturbios de la huelga general del 29-S en Barcelona, un sindicalista de la CNT, al no quedar acreditado que fuera el autor de los delitos que se le imputaban.
Sobre el acusado pendía un delito de atentado a agentes de la autoridad y un delito de desordenes públicos por los que la Fiscalía pedía tras años de cárcel por golpear a tres Mossos d'Esquadra con un megáfono.
Los hechos sucedieron por la mañana cuando el acusado, que formaba parte de un piquete informativo, se encontró con un grupo de policías que les impedía el paso en la Ronda Sant Antoni a la altura de la calle Tamarit porque estaba identificando a otro piquete.
Según los mossos que declararon en el juicio, el grupo reaccionó con violencia cuando se les impidió el paso, por lo que utilizaron las porras para dispersarlos y el acusado, Francisco M., utilizó su megáfono para agredir a dos de ellos y, más tarde, en la Rambla del Raval, a un tercero cuando trataban de detenerlo.
Varios testigos han asegurado que, si bien el sindicalista iba en primera fila, en el momento en que los Mossos realizaron la carga, que duró escasos segundos, utilizaba su megáfono para pedir a los manifestantes que no corrieran, ya que no estaban haciendo "nada ilegal".
En el escrito, del juez explica que los múltiples testigos, que desconocían al acusado, afirmaron que el grupo con el que se manifestaba no era antisistema sino que estaba formado por vecinos que protestaban de forma pacífica y que no cargaron contra la policía sino al contrario.
Además, su abogada presentó unas radiografías que verifican que en su detención le rompieron un brazo.
Por todo ello, el juez concluye que no ha quedado acreditado que las lesiones que sufrieron los agentes fueran provocadas por el sindicalista.
