BARCELONA, 26 Feb. (EUROPA PRESS) -
El pleno monográfico del Ayuntamiento de Barcelona sobre crisis se saldó hoy con un cruce de reproches entre Gobierno y oposición, y sin intervenir el alcalde, Jordi Hereu. Los grupos intervinieron durante 26 minutos y 41 segundos, y el Gobierno defendió que el alcalde afronta las dificultades económicas, mientras CiU, que forzó el debate, tildó de "vergüenza" la actitud del bipartito y le instó a dar ejemplo.
No se agotaron los 28 minutos previstos inicialmente para el pleno, que se basó en el debate de una proposición de CiU, que sólo reunió el apoyo del PP. Por Hereu habló el tercer teniente de alcalde de Hacienda y Promoción Económica, Jordi William Carnes, y los líderes del PP, Alberto Fernández Díaz, y de ERC, Jordi Portabella, no usaron su segundo turno de intervención.
El presidente de CiU en el Consistorio, Xavier Trias, calificó de desprecio "liquidar" la crisis en menos de media hora, y lo contrapuso al tratamiento en el Parlament, donde dedicaron 13 horas y media, y en el Congreso días antes. "Prometo que una situación como esta no vuelva a pasar" si es alcalde, advirtió.
Trias pidió un plan de austeridad para reducir cargos eventuales --que han aumentado un 12%--, suelos del personal directivo, bajar a la mitad la inversión en informes y disminuirla en publicidad y propaganda, y en alquileres, que este año ascienden a 16,3 millones. Además, defendió suprimir estructuras municipales duplicadas, apostar por inversiones productivas y más gasto social.
Apeló al programa de austeridad e innovación que, coincidiendo con los Juegos Olímpicos de 1992, aplicó el Ayuntamiento cuando el ex alcalde socialista Joan Clos era segundo teniente de alcalde. Permitió ahorrar 6.000 millones de pesetas en 1991, y el doble el año siguiente, recordó. "Ustedes son incapaces de hacer una cosa de estas", reprochó al bipartito.
Fernández Díaz acusó a Hereu de ser "un clon del señor Zapatero", el presidente del Gobierno, ya que "primero también negaba la crisis". Lamentó que el alcalde haya rechazado todas sus propuestas anticrisis, como el plan de austeridad, fomentar las rebajas fiscales, un fondo de contingencia, y el apoyo a emprendedores y comerciantes.
PRIORIDAD DEL BIPARTITO
Carnes aseguró que "no hay ninguna decisión que se tome en este ayuntamiento que no tenga la crisis como prioridad política". Añadió que lideran sin andar solos, y se escudó en que "esta ciudad tiene agenda", aunque admitió que crecerá más la cifra de 105.000 parados que tiene la ciudad.
Según él, ya tienen unos Presupuestos de 2010 anticrisis para apoyar a los sectores más desfavorecidos, y que incluía un plan de austeridad y contención del gasto, ante lo que reprochó a Trias que "ahora no es el momento de frases bonitas". "Puede que sus asesores le aconsejen, pero es el momento de trabajar todos juntos a corto, medio y larzo plazo", concluyó.
El segundo teniente de alcalde de Acción Social y Ciudadanía, Ricard Gomà (ICV-EUiA), también defendió que la crisis es su prioridad y que la afrontan con más inversión, políticas activas de empleo y sin "ningún tipo de recorte" de los servicios sociales. Añadió que la han provocado "los poderosos instalados en el enrequicimiento sin escrúpulos", aunque afecta a los más desfavorecidos.
Por su parte, Portabella justificó su voto en contra porque hace ocho semanas apoyó los Presupuestos municipales de 2010, que ERC transformó "muy relevantemente" para afrontar la crisis. Defendió un debate centrado en los trabajadores y las empresas, aunque rechazó un debate florentino que "al final cuando acaba no pasa nada".
