Oposición e ICV piden más control de la gestión económica de la Agencia Catalana de Cooperación

Actualizado: martes, 17 noviembre 2009 19:34

BARCELONA, 17 Nov. (EUROPA PRESS) -

Los grupos de la oposición --CiU, PP y Grupo Mixto-- e ICV lamentaron hoy las conclusiones del informe de la Sindicatura de Comptes sobre las cuentas de la Agencia Catalana de Cooperación al Desarrollo de la Generalitat (ACCD) de 2007 y reclamaron que tomen más medidas de control para asegurar una gestión eficiente.

El informe señala que las cuentas reflejan "razonablemente" la situación económica de la ACCD, pero insta a aumentar y mejorar los controles instaurados sobre las subvenciones que concede, ya que en dos convocatorias se conceden algunas a puntuaciones bajas y se deniegan otras con mejores resultados. También detecta retrasos en los informes de seguimiento que tienen que presentar los beneficiarios.

Otro de los puntos más discutidos hoy durante la comisión parlamentaria en la que la Sindicatura presentó el informe fue el hecho de que la ACCD tenía entonces 29 tarjetas bancarias, dos de ellas titularidad de personas en excedencia y que estaban en un cajón, por lo que el informe insta a reducir al máximo el número de tarjetas.

La diputada de CiU Pilar Pifarré lamentó la "mala gestión" de la entidad y aseguró no entender que para el trabajo que desarrolla necesiten tantas tarjetas, a pesar de que la agencia afirme que son para los viajes al extranjero de sus trabajadores. "No lo veo claro como para gestionarlo correctamente y la prueba es que no está gestionado correctamente", aseguró.

La diputada del PP Maria Àngels Olano aseguró que "no hay un control riguroso", y pidió un control del uso de los mecanismos financieros para el extranjero, independientemente de si son tarjetas o no.

Desde ICV-EUiA, Daniel Pi lamentó que al leer el informe de la Sindicatura "no luce la gestión" de la ACCD y señaló que el circuito de tarjetas tendría que haber supuesto "elemento de preocupación" para sus gestores. Añadió que algunos hechos ponen de manifiesto que "alguien tendría que haber tenido claro que determinadas prácticas no eran aceptables", y aseguró que existe una línea "clara, clarísima" de mejora.

El diputado José Domigo (Grupo Mixto) tildó la gestión de "cutrerío" y aseguró que 29 tarjetas para el número de trabajadores del organismo son muchas. Domingo afirmó que el procedimiento para adjudicar subvenciones es "claramente irregular".

La diputada de ERC Maria Àngels Cabasés defendió la gestión de la ACCD, y afirmó que el informe no señala que se haya encontrado ninguna irregularidad en la utilización de las tarjetas de crédito. Aseveró que los criterios para otorgar las subvenciones son públicos y se pueden consultar, y reclamó que el informe muestra un gestión "que se ajusta a la legalidad".

Desde el PSC, Jordi Terrades dijo que les hubiese preocupado "mucho más" que se hubiese hecho un mal uso de las tarjetas, y aseguró que los trabajadores las utilicen en el extranjero le parece "lo más lógico".

Tanto PP como CiU aseguraron también que no descontar de la nómina un adelanto de 800 euros a una trabajadora y un ingreso de 1.500 euros al director de Cooperación al Desarrollo y Acción Humanitaria sin devolver entonces y sin justificación --ambos subsanados ya--, son aspectos que no pueden pasar desapercibidos para los gestores de la ACCD.