Pasajeros y comerciantes de Castelldefels Platja consternados en el segundo día de luto

Actualizado: viernes, 25 junio 2010 16:49

Muchos viajeros constatan el hábito de cruzar las vías aunque esté prohibido

BARCELONA, 25 Jun. (EUROPA PRESS) -

Comerciantes y pasajeros de la estación de Castelldefels Platja siguen consternados en el segundo día de luto por la muerte de las 13 personas arrolladas por un tren cuando cruzaban las vías en la noche de Sant Joan para ir a una fiesta en la playa.

En declaraciones a Europa Press, Álvaro Leivas, del quiosco del apeadero, afirmó que sigue "en estado de shock" tras el suceso, porque los heridos acudieron a su comercio para comprar agua y limpiarse las heridas. "Hoy hay menos jóvenes de lo habitual en la playa", observó.

Jóvenes y adolescentes que se dirigían a la playa afluían este mediodía a la estación, cuyos andenes conservan ramos de flores, velas consumidas, y una banda de solidaridad con las familias de las víctimas que reza: "Compartiendo vuestro dolor".

Diversos curiosos se agolpaban para observar la estación y los medios de comunicación apostados en los andenes desde el paso superior que conecta los barrios a ambos lados de las vías.

Ismael, que trabaja en el bar de la estación, explicó a Europa Press que está "extremadamente nervioso" tras presenciar el suceso, y que pasará mucho tiempo hasta que recupere la normalidad. "No es cuestión de 48 horas, porque lo hemos pasado muy mal", dijo y se mostró partidario de poner vallas en los andenes para evitar que la gente cruce las vías.

Enrique Eneldo, del comercio 'Queviures de l'Estació', afirmó que hoy hay menos clientes y que uno de ellos, que sobrevivió al accidente, aun le relataba hoy el horror vivido.

Diversos viajeros en la estación expresaron a Europa Press la consternación por lo sucedido y todos constataron que es habitual ver a personas, sobre todo jóvenes, cruzando las vías.

"Lo veo muy a menudo, aseguró la pasajera Liliana Salvatierra, quien oyó las sirenas de las ambulancias y la policía la noche del accidente. Según relató, los ciudadanos en la playa, entre los que se contaba ella, celebraron la verbena totalmente ajenos al arrollamiento.

"Es extraño y muy triste volver hoy a la estación", apuntó por su parte Laura Blanco, al apearse del tren, y lamentó la "irresponsabilidad" de las personas que cruzan las vías.

La megafonía, que no anunciaba la prohibición de cruzar las vías, sí rogó a los pasajeros que se alejasen del borde del andén y anunciaba la huelga de Cercanías. En la estación permanecían dos vigilantes de seguridad.