BARCELONA, 8 Sep. (EUROPA PRESS) -
Los dos prostíbulos de Castelldefels (Barcelona) clausurados por orden judicial desde marzo suministraban hormonas, vitaminas y medicinas a sus trabajadoras para que rindieran más con los clientes, según consta en el escrito que la Fiscalía presentó ante la juez para pedir la prórroga del cierre y confirmaron fuentes del Ministerio Público a Europa Press.
En los registros de los locales Riviera y Saratoga en marzo se encontraron varios productos para aumentar el rendimiento de las prostitutas, así como armarios para guardarlos y listados con las dosis que debía tomar cada mujer, según publicó hoy 'El País'.
Por todo ello, y para prolongar la investigación sobre el caso de proxenetismo, inmigración irregular y corrupción policial, la juez de Instrucción número 33 de Barcelona, Elisabet Castelló, decidió ayer prorrogar seis meses más el cierre de los locales, cuya orden de clausura caducaba hoy.
Por este caso hay por el momento 19 imputados, aunque casi todos ya han sido excarcelados. La Fiscalía sostiene que algunos policías nacionales de la unidad de extranjería podían alertar de la redadas a los dueños de los locales a cambio de importantes sumas de dinero y regalos.
También están imputados tres abogados que supuestamente cobraban importantes cantidades de dinero de los prostíbulos, conchabados con un policía nacional, a cambio de no ser inspeccionados. Dos de ellos trabajaban para patronales de prostíbulos y discotecas. También están implicados inspectores del Ayuntamiento de Barcelona.
