La consellera Vilallonga y su antecesora Borrs destacan su aportación
BARCELONA, 29 Mar. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Generalitat, Quim Torra, ha lamentado la muerte este domingo del filósofo y crítico de arte Arnau Puig, que tenía "una mirada siempre viva del mundo de la cultura catalana. Se ha ido con unas aportaciones extraordinarias", ha afirmado en un apunte en Twitter recogido por Europa Press.
"Echaremos de menos su voz lúcida, crítica. Nos hizo mejores, como país, como cultura", ha asegurado la consellera de Cultura de la Generalitat, Maringela Vilallonga, que ha lamentado no poderle acompañar este domingo, en referencia a la restricción de velatorios por el coronavirus.
La portavoz de JxCat en el Congreso y exconsellera de Cultura, la filóloga Laura Borrs, ha sostenido que con su muerte "se va una voz lúcida, y el pensamiento y la crítica pierden un referente", en otro tuit recogido por Europa Press.
El poeta Carles Duarte ha descrito a Puig como "un hombre que ha iluminado el mundo artístico desde su implicación en la experiencia fundamental de Dau al Set" y ha añadido que fue inspirador, inquieto, sabio cordial, y ha mostrado cómo abrir nuevos caminos para el arte y el pensamiento.
MNAC Y UPC
El Museu Nacional d'Art de Catalunya (MNAC) ha afirmado que Puig fue "una referencia inmensa para el país", así como un gran protagonista de la cultura de vanguardia, pensador y activista incansable, colega generoso y querido, y ha destacado que deja una obra enorme y fundamental en sus escritos.
La Universitat Politcnica de Catalunya (UPC) ha lamentado la muerte de Arnau Puig, que fue catedrático de Estética de la Escola Tcnica Superior d'Arquitectura de Barcelona (Etsab), y ha anunciado que su legado bibliográfico y artístico estará disponible en la Biblioteca Oriol Bohigas-Etsab para estudiosos, investigadores, arquitectos, profesores y estudiantes de la escuela.
En las redes sociales también han publicado sus condolencias y han destacado su aportación a la cultura otras entidades y personalidades, como los escritores Vinyet Panyella y Juli Guillamon, el Institut Ramon Llull, el Ateneu Barcelons y el Espai Subirachs.
