BARCELONA, 30 May. (EUROPA PRESS) -
La distribución y recogida de jeringuillas, un indicador que se utiliza para valorar el consumo de drogas de venopunción, ha repuntado desde el inicio de la crisis en Catalunya y superó el millón de unidades en 2013.
Se trata de una cifra que no se alcanzaba desde 2004 y que ha presentado un crecimiento sostenido desde 2008, con una ligera caída en 2010, según ha explicado el conseller de Salud de la Generalitat, Boi Ruiz, en una respuesta parlamentaria recogida por Europa Press.
En relación a los municipios en los que se recogen más jeringuillas usadas, Barcelona lidera el listado, seguida de cerca de Sant Adrià del Besòs, Bages, Igualada, Gavà (Barcelona), Reus y Constantí (Tarragona), por este orden.
En el ámbito de la distribución de jeringuillas, Ruiz ha concretado que principalmente las reparten los equipos de calle (27,91%), seguidos de los centros de reducción de daños (25,05%), las narcosalas (21,79%), las oficinas de farmacia (19,64) y otros.
El conseller ha destacado "la importancia de los factores sociales y económicos como determinantes de la salud en general y de la salud mental en particular", lo que podría explicar el incremento del uso de jeringuillas desde el inicio de la crisis, que ha disparado los casos de vulnerabilidad social.
Esta situación no ha repercutido en un incremento del presupuesto que la Salud destina a programas de drogodependencias: mientras en 2010 invirtió 30,1 millones de euros --una partida que se había ido incrementando de forma ininterrumpida anualmente desde 2003--, en 2013 abonó 28,6 millones y en 2014, 29,4.
Sobre la incidencia del consumo de drogas entre los jóvenes de entre 15 y 29 años, Ruiz ha revelado un incremento desde el inicio de la crisis del alcohol (el 62,5% declara consumirlo habitualmente), la cocaína (el 1,7%), los hipnóticos (1,9%) y el éxtasis (0,3%).
