El Síndic d'Aran celebra un "día histórico" para que el aranés abandone la precariedad actual

Francés Boya
CONSELH D'ARAN
Actualizado: miércoles, 22 septiembre 2010 15:57

Boya no repetirá como diputado del Parlament para centrarse en su cargo de Síndic

BARCELONA, 22 Sep. (EUROPA PRESS) -

El Síndic d'Aran y diputado del PSC en el Parlament, Francés Boya, ha celebrado que este miércoles es un "día histórico" para la lengua aranesa por la aprobación de la Ley del Occitano, pero ha advertido de que aún queda mucho camino por recorrer para que esta lengua abandone el estado de "precariedad" actual.

En rueda de prensa, ha justificado la importancia de la ley porque hacía "más de treinta años" que la comunidad aranesa luchaba para un marco legislativo de estas características, y ha recordado que, hasta la fecha, todas las leyes lingüísticas aprobadas por el Parlament solo habían contemplado esta lengua de forma "tangencial".

"La ley cumple con los mínimos que requiere una lengua: un marco jurídico que la ampare y un poder político que la defienda", ha valorado el Síndic sobre la nueva normativa, y ha afirmado que es un primer paso para recuperar la plena normalidad del uso del aranés entre la población.

Pese a la satisfacción, Boya ha advertido de que no es "una varita mágica", por lo que la supervivencia del aranés y la mejora de su situación actual seguirá requiriendo el compromiso de las administraciones en la defensa y la promoción de esta lengua.

MAESTROS Y PERIODISTAS CON EL ARANÉS

El diputado socialista ha elogiado el trabajo "silencioso" que durante años han hecho muchas personas de la Vall d'Aran para que el aranés siguiera presente entre la población, y ha destacado el colectivo de maestros y el de periodistas.

"Sin ninguna compensación han hecho que la lengua siguiera viva, en estado precario pero viva. Éste es un sentimiento que traspasa cualquier frontera política y social", ha concluido.

Sobre la polémica por el nombre de la ley --'Ley del Occitano, aranés en el Aran'--, Boya ha justificado que el aranés es la denominación por la que el occitano se conoce en la Vall d'Aran, por lo que ha entendido que ambas denominaciones figuren en el nombre oficial de la ley.

"La Vall d'Aran no tiene ninguna intención de ser un elemento de discordia lingüística en el contexto del occitano", ha asegurado.

Boya ha concluido que la lengua es fundamental para el reconocimiento de la singularidad de una comunidad, y ha sostenido que sin "una lengua y una cultura" diferenciadas la Vall d'Aran no habría podido tener unas instituciones políticas propias.

EL FUTURO DEL ARAN EN EL PARLAMENT

Boya no repetirá como diputado en el Parlament, para centrarse en su cargo como Síndic de Aran, según ha manifestado, y ha hecho un balance "positivo" de su etapa como parlamentario, citando la aprobación de leyes importantes para su territorio como la aprobada este miércoles sobre la lengua, y la Ley de Veguerías, que garantizó la singularidad territorial de la Vall d'Aran.

Con su marcha, la presencia de una diputado de la Vall d'Aran en el Parlament dependerá de la configuración de las listas de los partidos en la provincia de Lleida, ya que Boya era el único diputado de este territorio en la Cámara catalana.