Los sindicatos de Mossos advierten que si Tura no les escucha "presionarán" con más "movilizaciones"

Actualizado: viernes, 14 julio 2006 17:37

BARCELONA, 14 Jul. (EUROPA PRESS) -

Los cuatro sindicatos de los Mossos d'Esquadra, que representan a más del 90% de los agentes, advirtieron hoy a la consellera de Interior, Montserrat Tura, que si no les recibe o escucha sus demandas "presionarán" con "otros tipos de movilizaciones imaginativas", a parte de las realizadas hasta ahora, consistentes en una huelga de celo en la imposición de multas.

Representantes del Sindicato de Policías de Catalunya (SPC-CC.OO.), Sindicato Autónomo de Policía (SAP-UGT), Colectivo Autónomo de Trabajadores (CAT-ME) y Asociación Profesional de Policías Autonómicos de Catalunya (APPAC) exigieron mejoras en las condiciones laborales de los agentes y más recursos humanos y materiales para afrontar con garantías el despliegue en toda Catalunya.

Según denunciaron, hasta el momento Tura sólo ha respondido a sus demandas ante los medios de comunicación y ha rechazado reunirse con ellos para negociar posibles soluciones a las problemáticas planteadas. Por ello, si en las próximas semanas no hay respuesta alguna por parte de Interior, convocarán otra rueda de prensa para anunciar las medidas concretas a tomar, que serán acordadas con sus afiliados.

Además, criticaron que los responsables de la Conselleria "cuiden mucho la imagen externa" del Cuerpo y no se preocupen por las condiciones laborales de los agentes, que han "empeorado" en los últimos años. Según el representante de SAP-UGT, Santi Martínez, a los cargos de Interior "no les interesa el colectivo, sino el rédito político".

Por esto quieren "hablar directamente" con la consellera, porque "los canales habituales no han funcionado", hay "autismo", indicó el representante del SPC-CC.OO., David José. "Que se digne a recibirnos", exigió José. Además, recordó que con esta actitud, la Conselleria "ha conseguido la unidad sindical".

"LOS POLÍTICOS PASAN, NOSOTROS NOS JUBILAMOS AQUÍ".

En este sentido, José recordó que los agentes "nos jubilamos aquí, mientras que los políticos van pasando", por lo que las supuestas malas condiciones laborales "afectan" a la imagen del Cuerpo ante la ciudadanía. "Hay que dignificar la profesión", reclamó.

En este sentido, aseguraron que sus reivindicaciones hechas públicas el pasado 27 de junio "no son mentira" como, según ellos, declaró la consellera. Además, "como policías" que son aportaron "pruebas" de sus quejas.

En concreto, aportaron numerosas fotografías, informes y quejas presentadas oficialmente por el mal estado de algunas instalaciones como la clínica forense de Barcelona, el Palacio de Justicia de la capital catalana o las comisarías de los distritos de Sarrià-Sant Gervasi y Ciutat Vella, además de las condiciones generales de seguridad laboral.

Tras la propuesta de hace 15 días de promover una huelga de multas, los sindicatos explicaron que en el primer día de la operación salida del verano y en el que empezaba a aplicarse el carnet de conducir por puntos, solamente se impusieron 500 denuncias por parte de unos 400 agentes. Esto, según ellos, supone un seguimiento "masivo" de sus postulados.

QUEJAS SOBRE COMISARÍAS Y HORARIOS.

Respecto a las medidas a tomar, el representante de APPAC, Pere Peña, reclamó que la Conselleriaerior apruebe el decreto sobre políticas de prevención de riesgos laborales, como ya tienen la Guardia Civil y la Policía Nacional y exige la normativa europea.

Como ejemplo de la falta de medidas de seguridad, Peña explicó que las comisarías no tienen "implementados" los planes de emergencia, por lo que en caso de desalojo no está claro quienes serían los responsables.

Respecto al despliegue, los sindicatos reclaman que se refuercen las plantillas y que no "se improvise" en la planificación del trabajo. "El despliegue se aguanta por la ilusión de los agentes" y su "entrega personal y voluntaria", lamentaron Martínez y José.

Igualmente, criticaron que los cuadrantes horarios dificultan la conciliación de la vida familiar y laboral y sólo son un "parche" ante la "falta de efectivos" que "afecta la salud" de los trabajadores.

Como ejemplo de estas condiciones laborales, el representante del CAT-ME, Oscar Moratilla, explicó que el pasado mes de marzo el 17% de la Sala Regional de Barcelona estuvo de baja y que de las 600 plazas ofertadas a guardias civiles y policías nacionales sólo se han cubierto 80 y algunos de ellos quieren volver a sus antiguos Cuerpos. "Ya querríamos las condiciones laborales de otros cuerpos", señaló David José.

'OKUPAS' DE GRÀCIA.

Como ejemplo de descoordinación y falta de efectivos, los sindicalistas pusieron los últimos altercados provocados el pasado 28 de junio por los 'okupas' previamente al desalojo de la casa 'La Fera', en el barrio de Gràcia de Barcelona. Según ellos, faltaban agentes y los efectivos antidisturbios tuvieron "un tiempo de respuesta superior" al normal porque tuvieron que venir desde la sede central en Sabadell.

Además, alegaron que los agentes antidisturbios de la Guardia Urbana no se presentaron, lo que evidencia, según ellos, la falta de coordinación con este cuerpo.

Ante los posibles disturbios en las próximas fiestas mayores de Gràcia y Sants, el representante del SPC se mostró esperanzado de que "los representantes políticos se sienten a hablar y, por el bien de todos, se arregle". "Que abandonen las diferencias", reclamó.

EL PP RECLAMA FRENAR EL DESPLIEGUE.

Por su parte, el portavoz adjunto del PP en el Parlament, Daniel Sirera, reclamó a Interior que "ralentice" el despliegue para "consolidar el modelo" y "garantizar los estándares de calidad" que la Policía catalana "tiene que tener".

"Las prisas para acabar lo más pronto posible el despliegue y que se vean los uniformes de los Mossos en toda Catalunya está provocando graves problemas laborales con los agentes y la desprotección policial en buena parte del territorio", explicó Sirera. Para él, "el despliegue precipitado y fundamentado en el sacrifico de las condiciones laborales de los agentes puede llevar al desprestigio del Cuerpo".

En un comunicado, el PP también criticó la "obsesión" del Gobierno catalán para recaudar y se quejó de la falta de coordinación con las otras policías.