BARCELONA 27 Mar. (EUROPA PRESS) -
El Servei Català de Trànsit (SCT) prevé que salgan del área metropolitana de Barcelona unos 370.000 vehículos en la segunda fase de la operación salida de Semana Santa entre este jueves a las 15 horas y este viernes, además de que se espera que el retorno presente más dificultades con 605.000 vehículos.
Según explicó en rueda de prensa el director de Trànsit, Joan Josep Isern, pese a que esperan una movilidad similar a los dos años anteriores --variará un 1%--, la crisis puede hacer que muchas familias hagan desplazamientos de ida y vuelta en un mismo día durante estos días festivos.
La climatología prevista para estos días de Semana Santa hace augurar que los desplazamientos serán hacia la Costa Daurada y la Costa Brava, lo que afectará a los corredores viarios costeros, pero al mismo tiempo a las zonas de montaña porque las últimas nevadas mantienen las estaciones de esquí abiertas.
Para Trànsit, el objetivo de este dispositivo de Semana Santa es el descenso de la mortalidad respecto al año pasado, cuando hubo 12 muertos en 9 accidentes y del 2011, con 7 siniestros y 9 víctimas mortales.
Para garantizar la seguridad, los Mossos d'Esquadra se despliegan unos 400 agentes cada día --en total casi 2.000 desde el viernes pasado--, que harán 1.405 controles: 467 de alcoholemia y drogas, 424 de casco y cinturón, 251 de transportes y 263 de velocidad excesiva o inadecuada.
Durante estos días, Trànsit implementará varias medidas de ordenación de salida y retorno, anulando vías lentas, añadiendo carriles adicionales e invirtiendo la prioridad de algunas rotondas.
CAMIONES POR LA AP-7
Se restringirá al paso de camiones de gran tonelaje en todas las carreteras menos en la autopista AP-7 entre La Jonquera y Riudellots, donde podrán continuar circulando, para evitar complicaciones viarias en la N-II en Bàscara, donde hay diariamente concentraciones de vecinos que cortan la vía para reclamar el desdoblamiento.
El carril Bus-VAO de la C-58 funcionará en función de las complicaciones de tráfico, y desde el Centre d'Informació Viària de Catalunya (Civicat) decidirán si es de entrada o salida en función de las retenciones.
Este jueves será de salida, mientras que el domingo 31 de marzo y el lunes de Pascua serán de entrada a la capital catalana, y en momentos excepcionales de tráfico, podrá abrirse a todo tipo de vehículos, aunque por norma general seguirá siendo para autobuses, motocicletas y coches con dos o más ocupantes.
Además, en esta operación se han estrenado las cámaras por radioenlace de la C-16 entre Berga y el Túnel del Cadí, un eje que registra una alta movilidad en periodos festivos y fines de semana.