El jefe de Mossos en Barcelona asegura que serán una policía leal a la sociedad y las instituciones
BARCELONA, 24 Abr. (EUROPA PRESS) -
El mayor de los Mossos d'Esquadra, Josep Lluís Trapero, ha asegurado que la policía catalana continuará trabajando contra el 'top manta' en Barcelona ya que es una actividad ilícita que hace mucho daño al comercio, pero ha avisado de que no pueden destinar "recursos ilimitados" porque supondría restar efectivos a la lucha contra el terrorismo yihadista.
En su discurso este lunes en el acto del Dia de les Esquadres de la Región Metropolitana de Barcelona, Trapero ha asegurado que Barcelona es el "escaparate" de Catalunya en el mundo, y que de las más de 1,6 millones de horas de patrullaje antiterrorista que realizan Mossos, 458.000 son en la capital catalana.
"Un trabajo es duro y difícil, también peligroso", ya que los que están más expuestos son los que están uniformados dando seguridad, ha indicado.
El mayor ha citado otras problemáticas en las que la policía catalana se ha fijado, especialmente los robos con fuerza en domicilios, para lo que ha creado un grupo polivalente porque suponen, más allá de las pérdidas económicas, una invasión a la intimidad, por lo que quiere lograr un "cambio de mentalidad" para combatirlos.
Ha recordado que el conjunto de hechos delictivos en Barcelona ha crecido un 1% en 2016, y que los hurtos lo hicieron un 5%, pero que en cambio los robos violentos han caído un 7% y los robos en casas un 17%.
Respecto a los hurtos, ha recordado que seis de cada 10 denuncias en la ciudad son por esta tipología, que a su vez supone un 65% de los hechos contra el patrimonio que se denuncian en Barcelona, y ha apostado por encontrar nuevas herramientas para erradicarlos.
POLICÍA "LEAL"
En su intervención, el comisario jefe de la Región Metropolitana de Barcelona, Joan Carles Molinero, ha asegurado que la policía catalana será "leal a la ciudadanía y a las instituciones a las que sirve", y se ha mostrado convencido que no defraudará a la sociedad.
En su discurso durante el acto, Molinero ha apostado por lograr la "consolidación definitiva" del modelo de la Policía de Catalunya como una policía cercana, democrática, ágil, flexible, tolerante, sensible con los más vulnerables y profesionalizada.
DESCENSO DESDE 2010
Ha destacado el descenso continuado de hechos delictivos en la ciudad entre 2010 y 2016, de un 14,2%, un descenso en cifras absolutas de 30.000 hechos delicitivos menos, unos "resultados satisfactorios", aunque hay que continuar contra tipologias que causan alarma y perjuicio a las personas.
Ha vaticinado que los próximos años serán más intensos y que para afrontarlos habrá que reforzar la persecución de los delitos en la ciudad, desde los hurtos --los más numerosos en la ciudad--, los robos violentos, la violencia de género, los delitos tecnológicos y la lucha contra el terrorismo yihadista.
También ha apuntado la necesidad de reforzar al servicio a la ciudadanía desde la proximidad, haciendo especial hincapié en los más necesitados, así como la gestión integral de la seguridad en los grandes eventos de la ciudad.
COORDINACIÓN POLICIAL
El comisionado de Seguridad de Barcelona, Amadeu Recasens, ha expresado en su discurso que Catalunya tiene pendiente completar su sistema de seguridad pública en el que es "imprescindible" que todos los cuerpos policiales estén coordinados por un objetivo común.
Para Recasens, que los Mossos y la Urbana dependan de administraciones diferentes no debe ser ser un impedimento para que formen un mismo modelo, y ha destacado que la seguridad de Barcelona "no se entendería sin el concurso y la colaboración leal" de Mossos, Guardia Urbana, otros cuerpos policiales y agentes de seguridad públicos y privados.
Ha enumerado los retos importantes de la ciudad, como gestionar el impacto del turismo, los cambios en la movilidad, la amenaza terrorista, los distintos usos de la ciudad y sus cambios demográficos, que obligan a modernizar y repensar a los cuerpos policiales.
Durante el acto se han entregado felicitaciones a 230 personas entre miembros de los Mossos, de otros cuerpos policiales y representantes de la sociedad civil, entre ellos, agentes que salvaron la vida a personas con sus intervenciones.
