BARCELONA, 16 Ago. (EUROPA PRESS) -
El Ayuntamiento de El Vendrell (Tarragona) ha acusado al Govern y al Estado de no servirse de sus competencias para combatir el 'top manta' y ha exigido que actúen, además de reafirmado en la necesidad de negociar con los vendedores ilegales para evitar que sus conflictos con la policía ahuyenten al turismo.
En un comunicado, el Consistorio ha subrayado que ni la Generalitat ni el Gobierno central han actuado "en ningún momento" para acabar con la venta ambulante de artículos falsificados en el municipio, y ha recordado que no cuentan con los recursos económicos ni humanos para hacer frente al fenómeno.
Ha señalado que la policía municipal no puede dejar de hacer su trabajo para asumir los cometidos de los Mossos d'Esquadra o de la Policía Nacional --menos si cabe en una localidad que pasa de los 36.000 a los 100.000 habitantes en verano--, y ha recordado que los 'vendrellencs' "pagan sus impuestos y no pueden aceptar que no se les atienda en situaciones tan graves".
"¿Dónde están las otras administraciones? ¿Por qué no ejercen sus competencias en El Vendrell?", se ha preguntado, recordando los violentos conflictos del año pasado entre 'manteros' y policías ante los vecinos y turistas.
Asimismo, ha justificado la decisión de negociar con los vendedores ilegales para que se ubiquen en zonas menos turísticas como una forma de evitar "una situación alarmante y peligrosa y un daño importante a la economía del municipio", en gran parte dependiente del turismo.
"Cualquier solución que no sea la fuerza es ineficaz", ha constatado, precisando que no conocen ninguna localidad que haya frenado al fenómeno con multas a vendedores y compradores o con campañas de sensibilización.
"Otros municipios toleran el 'top manta' porque no tienen otro remedio", ha apostillado en rechazo de las críticas que ha recibido por parte de la oposición y los comerciantes. A la medida de El Vendrell, liderado por Benet Jané (CiU), se ha sumado Calafell (Tarragona), cuyo alcalde es Jordi Sánchez (PSC).
