MELILLA 20 Ene. (EUROPA PRESS) -
La Confederación Española de Policía (CEP) en Melilla ha denunciado que la agresión producida a un policía en el puesto fronterizo de Barrio Chino, el tercero en importancia entre Melilla y Marruecos, "mucho tiene que ver la falta de personal en los puestos fronterizos", al asegurar que "el número de alborotadores ha ido creciendo y el de funcionarios ha caído considerablemente".
El sindicato, de este modo, ha condenado la agresión sufrida el jueves por un agente de la Policía Nacional en el paso fronterizo de Barrio Chino cuando el agente trataba de evitar la entrada desde Marruecos a Melilla a un grupo numeroso de porteadores y recibió "botellazo" que le causó heridas en una ceja.
Para la organización policial, "la solución hay que darla hoy, no mañana", y "pasa por limitar el número de porteadores en los puestos fronterizos, medidas que fueron anunciadas por ambos portavoces del Gobierno estatal y local".
La confederación ha indicado que se debe librar una partida económica para servicios extraordinarios, y que los funcionarios que estén libre de servicio, y voluntariamente quieran, trabajen para montar un núcleo de seguridad permanente para mantener el orden en la zona, con separación de funciones explícitas con los funcionarios dedicados al control de documentos.
"Hoy, prestar servicio con tan pocos funcionarios y tantos miles de porteadores, hace que la situación se nos escape de las manos, a la espera de los refuerzos prometidos que no llegan", han advertido desde la CEP.
A juicio del sindicato melillense, la reordenación de las fronteras desde el pasado mes de noviembre de 2017 "ha supuesto un incremento de trabajo en todas las fronteras que no se puede sostener con el personal que dispone en el grupo de funcionarios que están destinados en las fronteras".