MELILLA, 5 Mar. (EUROPA PRESS) -
La Policía Local ha incautado en Melilla unos 3.000 kilogramos de mercancías a vendedores ambulantes ilegales durante el mes de febrero; en concreto, ropas usadas, electrodomésticos de segunda mano, entre otras, así como 270 kilogramos de productos perecederos.
Según ha informado la Consejería de Seguridad Ciudadana, las actuaciones se materializado en 18 intervenciones, en los que se han aprehendido aproximadamente 270 kilogramos de frutas frescas, frutos secos, bivalvos, pescados, verduras, hortalizas, pasteles o pan, entre otros productos.
Su portavoz ha indicado que se trata "de todo aquello que pudiera venderse en mercados, supermercados o cualquier establecimiento del ramo", en el marco de unas actuaciones desarrolladas en su mayoría por las zonas del Polígono y frontera de Beni-Enzar, Vía Francesa y diferentes distritos.
Independientemente de incautarse estas mercancías, Seguridad Ciudadana ha subrayado que han desmantelado puestos ambulantes irregulares de preparaciones alimenticias con sus menajes de cocina y enseres, que "además no reunían con las mínimas condiciones higiénico-sanitarias".
Igualmente, la Policía Local ha incautado también unos 3.000 kilogramos de mercancías como por ejemplo ropas usadas, electrodomésticos de segunda mano, etcétera, y "todo este material fue retirado, para su destrucción, por camiones de la empresa de limpieza requeridos para estos operativos".
Por último, durante el mes de febrero han sido denunciados doce concesionarios de puestos de venta ambulante en mercadillos, por tener al frente de los mismos a personas no autorizadas, transportistas de pescados, siete propietarios de establecimientos como fruterías por ocupar la vía pública (aceras) con cajas de mercancías, entre otras intervenciones.
