CEUTA 3 Ago. (EUROPA PRESS) -
Las consejerías de Sanidad y Medio Ambiente del Gobierno de Ceuta desaconsejan a través de sendos informes técnicos la ejecución del proyecto de construcción de una planta de biodiésel que la Autoridad Portuaria de la ciudad autónoma resolvió adjudicar a la empresa Biocarburantes del Estrecho hace tres años con una inversión que se supone alcanzaría los 72 millones de euros, según informaron a Europa Press fuentes del Ejecutivo local.
La concesionaria de la planta advirtió a través de una nota de que recurrirá la decisión de paralizar el proyecto, de la que hasta ahora sólo ha tenido conocimiento "de forma extraoficial" y lamentó que el proceso administrativo ligado a su sustanciación haya estado "plagado de irregularidades".
"Los argumentos técnicos que se interponen, que tienen que ver con el almacenamiento de Metanol, han quedado suficientemente contestados a lo largo del proceso en la abundante documentación que al respecto se puso en manos de los técnicos de la Ciudad", aseguró Biocarburantes, empresa a la que sólo le faltan las correspondientes licencias de la Administración local para el inicio de las obras, que pensaba comenzar en octubre.
Aunque el Gobierno ceutí que preside Juan Vivas (PP) considera que "la salud de los ceutíes" es prioritaria "ante cualquier inversión, por muy importante que esta sea", la adjudicataria del proyecto estima que los 2.000 metros que como mínimo deben separar de acuerdo con la legislación cualquier industria fabril considerada peligrosa o insalubre de un núcleo urbano "esta norma general es susceptible de excepciones".
Según Biocarburantes "actualmente, todas las plantas de biodiésel que están situadas en puertos, como la de Castellón o la del Bilbao, se encuentran a distancias inferiores a los 2.000 metros respecto al primer núcleo urbano y son perfectamente legales puesto que cumplen con los requisitos de seguridad establecidos en la normativa actual, como ocurre con el proyecto de la planta de biodiesel en Ceuta", que se encontraría a 500 metros del núcleo habitado más cercano.
La concesionaria del proyecto, que opina que la decisión de proseguir con los trámites del proyecto "es eminentemente política" y por lo tanto sólo compete "al presidente de la Ciudad, Juan Vivas", solicita "que se realice un tercer informe independiente" que resuelva la controversia existente entre los de la Administración local, contrarios a la planta, y otro ajeno "positivo respecto a la construcción" de cuya existencia dice tener constancia la empresa.
ENTRE 100 Y 150 EMPLEOS
La adjudicataria de la obra estima que la construcción y posterior explotación de la planta generaría entre 100 y 150 empleos directos e inducidos en Ceuta pero avisa de que en caso de verse cancelada se vería "obligada a impugnar judicialmente cualquier desarrollo industrial o logístico de la ciudad o del puerto de Ceuta para no ser víctimas de un agravio comparativo de imposible justificación por parte de los técnicos".
"La cancelación del proyecto y las consecuencias que se derivarían impedirían competir al puerto de Ceuta con el de Tánger, que dada su mayor dimensión y dado el apoyo institucional que está recibiendo del Gobierno de Marruecos supone una amenaza de primer orden para el bienestar futuro de los ceutíes", recordó Biocarburantes.