MADRID, 3 Ago. (CHANCE) -
Como marca la tradición y cumpliendo con su agenda oficial, los Reyes Don Felipe y Doña Letizia, acompañados de la Reina Sofía como en años anteriores, han recibido a los 450 invitados del ámbito político, empresarial, académico y social de las Islas Baleares en la tradicional recepción en el Palacio de La Almudaina.
La imagen de la emérita Reina Sofía acompañando a Sus Majestades en dicho acto ya se ha convertido en un imprescindible del verano, repitiéndose tras la proclamación de Felipe VI en 2014. Pero este año la cita cobra especial interés después de que durante la Semana Santa y en la misma isla de Palma la Reina Letizia protagonizase un polémico desencuentro con Doña Sofía, el cual cinco meses después ha marcado toda la estancia de los Borbones en Marivent.
Ante la ausencia de Dos Juan Carlos en la isla por sus problemas de cadera, fuimos testigos por primera vez de un sorprendente paseo por el Mercat de l'Olivar de la Reina Letizia, la Princesa Leonor y la Infanta Sofía en compañía de Doña Sofía, dando muestra de la buena relación y compartiendo confidencias entre los puestos del mercados. Después pudimos ver a la familia prácticamente al completo acudir al concierto del violinista Ara Malikian.
En la recepción de hoy se han repetido las muestras de cariño y complicidad entre las monarcas, llegando incluso a compartir confidencias al oído en varias ocasiones.
Despidiéndose de los actos oficiales hasta la vuelta de las vacaciones, la Reina Letizia ha optado por un colorido estilismo formado por una falda midi en azul con estampado floral de Carolina Herrera y un top sin mangas y cuello cisne en naranja. Para completar el estilismo ha optado por unas sandalias cruzadas por delante y una tirante coleta baja. La Reina Sofía por su parte ha optado por una blusa estampada y pantalones en color camel, fiel a su estilo, abandonando el divertido ventilador de mano con el que la veíamos en el mercado, pero aferrándose a un abanico para sobrellevar el calor que precisamente ha comentado con los medios de comunicación allí presentes.
En esta ocasión el número de invitados se ha reducido a 450, siendo la primera vez desde la coronación de Felipe. Una vez celebrada la recepción, Sus Majestades acompañados de los invitados podrán disfrutar de una cena en el Palacio de La Almudaina de la mano del cocinero mallorquín Santi Taura.
Está previsto que este sea el último acto oficial de la Reina antes de sus vacaciones privadas y la última vez que veamos a Don Felipe después de que mañana haga entrega de los premios las regatas de la Copa del Rey Mapfre, despidiéndose así de Palma de Mallorca.
