Nubecillas moleculares envuelven el agujero negro central de la galaxia

Envoltorio molecular de Sagitario A
ALMA (ESO/NAOJ/NRAO)/ J. R. GOICOECHEA (INSTITUTO
Actualizado: lunes, 22 octubre 2018 17:23

   MADRID, 22 Oct. (EUROPA PRESS) -

   Esta imagen captada con el telescopio ALMA muestra el campo circundante de Sagitario A*, el agujero negro supermasivo oculto en el centro de la Vía Láctea, destacado con un pequeño círculo.

   Nuevas investigaciones con ALMA (Atacama Large Millimeter/submillimeter Array) han revelado pruebas de gas y polvo interestelar orbitando el agujero negro a altas velocidades.

   Las nubes gaseosas ricas en hidrógeno molecular que se han identificado se conocen como nubecillas moleculares, y nunca antes se habían detectado en forma indefinida. Esta imagen muestra, en realidad, la distribución de moléculas de monóxido de carbono, el segundo componente molecular más abundante de las nubecillas.

   Las nubecillas se encuentran a 26.000 años luz de nosotros, orbitando de forma rápida y relativamente cercana al agujero negro, a una distancia de aproximadamente un año luz. La alta resolución de ALMA permitió a los científicos detectar las nubecillas, producto de nubes masivas preexistentes que giran alrededor del centro de nuestra galaxia.

   Estas nubes experimentaron disrupción mareal transformándose en fragmentos densos y un componente de menor densidad y corta duración. Este último fue identificado gracias a las señales dejadas por el paso de la radiación sincrotrónica emitida por Sagitario A a través de gas difuso entre las nubecillas, informa en su web el telescopio ALMA.

   Si bien las nubes de gas molecular tienen el potencial de formar nuevas estrellas, es poco probable que estas nubecillas produzcan recién nacidos estelares. Tienen una masa comparativamente pequeña, cerca de 60 veces la del Sol, y están cerca de las enormes fuerzas gravitacionales, turbulentas y punitivas ejercidas por Sagitario A*.

   Mientras que las estrellas que orbitan a Sagitario A* han sido observadas sistemáticamente, estas densas nubecillas moleculares no se habían detectado anteriormente tan cerca del centro de nuestra galaxia.