MADRID, 5 May. (EUROPA PRESS) -
El Ministerio de Ciencia e Innovación está trabajando en la elaboración de protocolos sobre medidas de seguridad para que los buques oceanográficos que gestiona retomen su actividad, que se vio interrumpida por la pandemia de coronavirus.
Así lo ha afirmado este martes en el Pleno del Senado el ministro de Ciencia e Innovación, Pedro Duque, en respuesta a una pregunta del senador del PP Sergio Ramos, sobre el número de investigadores españoles que está trabajando actualmente en la crisis sanitaria.
Según ha indicado Duque, su Departamento ha hecho "todo lo posible" para que ningún proyecto se paralizase como consecuencia de la pandemia. De hecho, tal y como ha expresado, el Ministerio aprobó la prórroga de contratos a investigadores predoctorales y centros públicos de referencia como el Centro Nacional De Investigaciones Oncológicas (CNIO) ha continuado con sus investigaciones en materia del cáncer con personal reducido debido a las recomendaciones sanitarias.
Si bien, "los buques oceanográficos no ha habido forma de continuar a corto plazo". "Estamos trabajando en protocolos sobre medidas especiales que permita pronto retomar su actividad", ha subrayado el titular de Ciencia e Innovación.
La Flota Oceanográfica Española, considerada una de las Infraestructuras Científicas y Técnicas Singulares (ICTS) de España, está compuesta por más de una decena de buques oceanógraficos que el Gobierno gestiona a través de distintos organismos: el Instituto Español de Oceanografía (IEO) --organismo público de investigación adscrito al Ministerio de Ciencia e Innovación--; el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), también de Ciencia e Innovación; y el Ministerio de Defensa.
Uno de los buques más importantes es el Buque de Investigación Oceanográfica (BIO) Hespérides, de la Armada Española y operado por el Ministerio que dirige Duque, que desde 1991 realiza las campañas antárticas españolas. La Campaña Antártica de este año, la número XXXIII, terminó una semana antes de lo previsto por el brote de coronavirus, por lo que sus científicos, militares y técnicos tuvieron que emprender a finales de marzo su regreso a España.
