Entregan la última antena del telescopio ALMA

Telescopio ALMA
ESO
Actualizado: martes, 1 octubre 2013 16:48

MADRID, 1 Oct. (EUROPA PRESS) -

La última antena del Atacama Large Millimeter/submillimeter Array (ALMA) acaba de ser entregada. Se trata de la número 66 y está formada por un plato de 12 metros de diámetro. Su construcción ha corrido a cargo del consorcio europeo AEM (European AEM Consortium).

Norteamérica y Europa ha proporcionado 25 antenas cada una y Asia ha entregado 16 en el que es el mayor contrato concedido por el Observatorio Europeo Austral (ESO) hasta el momento. Según ha informado ESO, se espera que a finales de 2013 el telescopio esté operativo completamente.

Se trata de antenas de radio de alta precisión, capaces de captar ondas milimétricas y submilimétricas, se encuentren en funcionamiento y operen de forma simultánea como un solo telescopio, en un conjunto que se extenderá hasta 16 kilómetros a través del llano de Chajnantor, ubicado en el desierto de Atacama en el norte chileno.

El Observatorio ALMA fue inaugurado por el presidente de Chile, Sebastián Piñera, en marzo de 2013. Este evento marcó la culminación de todos los sistemas principales del enorme telescopio y la transición formal de un proyecto en desarrollo a un observatorio completamente operativo.

Con esta última entrega, la fase de construcción de las antenas de ALMA llega ahora a su fin y permite el uso para fines científicos de las 66 antenas, lo que supone el comienzo de una nueva era de descubrimientos astronómicos. "Este es un importante hito para el Observatorio ALMA, ya que permite a los astrónomos de Europa y otros lugares utilizar el telescopio ALMA de forma absoluta, con toda su sensibilidad y su área total de recolección de luz", ha comentado el gerente del proyecto en Europa, Wolfgang Wild.

ALMA ayudará a los astrónomos a responder preguntas trascendentales acerca de los orígenes cósmicos. El telescopio observa el Universo usando luz con longitudes de onda milimétricas y submilimétricas, ubicadas entre la luz infrarroja y las ondas de radio en el espectro electromagnético. La luz a estas longitudes de onda proviene de algunos de los objetos más fríos y distantes del cosmos. Entre estos se encuentran las frías nubes de gas y polvo en donde nacen nuevas estrellas y las galaxias remotas ubicadas en los confines del universo observable.

El Universo es un lugar prácticamente inexplorado en estas longitudes submilimétricas, ya que los telescopios requieren condiciones atmosféricas con niveles extremadamente bajos de humedad, como las que entrega el llano de Chajnantor, además de enormes antenas y avanzadas tecnologías de detección.