Alginet llora el crimen de Verónica y pide seguir luchando por la erradicación de la violencia contra las mujeres

VALNCIA 11 Ago. (EUROPA PRESS) -

La localidad valenciana de Alginet ha mostrado este jueves su consternación por la muerte de Verónica, una mujer de 33 años que este miércoles perdió la vida tras ser apuñalada por el tío de su marido, que se suicidó posteriormente. El municipio ha despedido a la joven con una concentración ante el Ayuntamiento y un minuto de silencio, tras la lectura de un manifiesto en el que la concejala de la Mujer, María José Martínez, ha pedido seguir luchando por la erradicación de la violencia contra las mujeres.

"Acudimos para mostrar nuestro rechazo a esta lacra social que es la violencia contra las mujeres, sea del cariz que sea, pero en la que siempre acabamos pagando las mismas: las mujeres", ha dicho la edil, que ha destacado que la fallecida era una vecina del pueblo: "No era más que una chica que tenía una familia, que trabajaba y que le gustaba la zumba; como podemos ser cualquiera de nosotras y que deja un vacío y una situación lamentable en su casa". El consistorio se ha puesto en contacto con la familia para ofrecerle la ayuda y apoyo que necesiten y que esté a su alcance.

La edil ha destacado la actuación de la Policía Local y la coordinación con los servicios sociales tras el suceso; ha subrayado que la localidad cuenta con la USAF, una unidad formada por tres agentes y dirigidos por un inspector formados específicamente para casos en que las mujeres son violentadas; que cada año realizan acciones en colegios; están adheridos a la Red de municipios protegidos contra la violencia de género y disponen de puntos violenta en los eventos pero "no es suficiente".

"Tenemos que continuar luchando por la concienciación y la erradicación de esta lacra donde la desventaja física es sinónimo de sufrimiento y de muerte como en el caso de Verónica", ha indicado, y ha añadido que denunciar la más mínima sospecha es "cosa de todos". "La complicidad también es delito y no denunciar moralmente nos hace cómplices", ha concluido.