Esta noticia sustituye a la anterior sobre el mismo tema ya que el nombre correcto de la actriz protagonista es Luisa Martín. A continuación voilvemos a transmitir la información.
VALENCIA, 8 Ene. (EUROPA PRESS) -
El Teatro Talía de Valencia abre una debate sobre el bien y el mal, al tiempo que realiza una denuncia política sobre la tortura con 'La muerte y la doncella', un drama que deja "huella" en el espectador y que le dejará "tocado, reflexionando". La obra, que estará en cartel hasta el 1 de febrero, muestra cómo "el torturador es capaz de justificarse a si mismo" y "cómo la maldad a gran escala, la maldad de estado, se puede justificar y se justifica", de forma constante incluso en la época actual.
Así lo explicaron hoy en rueda de prensa el director de la función, Eduardo Costa, y el elenco de actores formado por Luisa Martín, Emilio Gutiérrez Caba y José Saiz, que cuentan la historia de una mujer que fue secuestrada y torturada durante varios meses en la dictadura chilena, y que casi veinte años después, ya casada con un prestigioso jurista, nombrado presidente de la comisión que ha de investigar los crímenes de guerra, se reencuentra con uno de sus supuestos torturadores.
Para Luisa Martín, que encarna a la protagonista, Paulina Salas, este texto es "universal, una reflexión permanente cómo la maldad a gran escala se justifica". De hecho, apuntó, "lo leemos actualmente en los periódicos, hay muchos criminales que no tienen castigo y muchas historias que no se han revisado, y lo que me parece más grave es que no se le devuelva la dignidad a las víctimas", sentenció.
En la misma línea, Emilio Gutiérrez Caba, que interpreta al doctor Miranda, uno de los torturadores, señaló que 'La muerte y la doncella' hace una "reflexión muy profunda sobre si realmente existe el bien y el mal, si realmente el mal se arrepiente alguna vez de ser malo, con una conclusión demoledora: el malo nunca se arrepiente de ser malo", aseveró.
El doctor Miranda, dijo, es aparentemente "una persona normal, con esa ambigüedad humana, que en situación determinada se deja arrastrar hacia la maldad. Es una persona sonriente como todos lo malvados, que son muy sonrientes, ahí tenemos al señor George W. Bush, con cara de tonto pero sonriente y que ha hecho grandes barbaridades", apuntó.
En su opinión este montaje tiene una "importancia social muy necesaria" porque "hay que denunciar estas cosas". Así se mostró "orgulloso" de hacer un proyecto como éste que "evidentemente cuenta algo, es rotundo y demoledor". Además, continuó, "este país es uno de los países donde Amnistía Internacional más hincapié hace en la tortura personal, hay que salpicárselo a la sociedad y que esto hay que corregirlo inmediatamente", advirtió.
Es más, añadió, "esos militares siguen ahí, esa gente no ha sido juzgada aún, esos militares no han sido responsabilizados, sabiendo que han cometido cerca de 30.000 asesinatos y eso es algo que nos compete también a la comunidad internacional. Nada es ajeno al hombre", puntualizó.
Por ello, Gutiérrez Caba consideró que "en los tiempos actuales es importante que la gente se posicione de una manera definitiva. La sociedad tiene que estar frente a estas cosas constantemente vigilando". "Seamos de izquierdas o de derechas tenemos que defendernos para ser libres". Según dijo, el golpe de estado de 1973 está muy cerca, "no pasemos tan rápido las páginas del libro. Se puede repetir en cualquier momento", alertó.
Por su parte, José Saiz, que da vida al marido de Paulina, Eduardo Escobar, ofrece "un poco la visión del espectador, que al principio duda mucho de la credibilidad de Paulina, y después va cambiando. El público navega por los sentimientos" de este personaje, afirmó el actor.
Para el director del montaje, Eduardo Costa, 'La muerte y la doncella' constituye "una plataforma para decir cosas y que el espectador salga a la calle y se posicione", qué haría en caso de ser cada uno de los tres personajes. De hecho, los asistentes a la obra saldrán "tocados y reflexionando", aseguró.
COMEDIA O DRAMA
Emilio Gutiérrez Caba anunció que, después de 'La muerte y la doncella' "no voy a hacer más dramas ya. Es el último que hago, procuraré hacer comedias, que es mucho más rentable para mi espiritualmente". "Eso no quiere decir que una obra de denuncia no sea siempre interesante" pero "son personajes muy duros y sale uno con una cierta pesadumbre personal", explicó.
Por su parte, Luisa Martín indicó que desde hace un tiempo ha sido descubierta como actriz dramática se mostró "encantada", aunque no descartó ningún género. "Yo soy una actriz, --dijo-- lo que me gusta es que los personajes tengan cuerpo y los proyectos sean interesantes. Procuro que casi todos mis personajes tengan cierta lectura social".
