VALENCIA, 17 Nov. (EUROPA PRESS) -
Representantes de escuelas y asociaciones de padres de colegios católicos valencianos han criticado el nuevo decreto de admisión de alumnos que la Conselleria de Educación llevará esta semana a la Mesa Sectorial y que incluye, entre otros cambios, volver a primar la proximidad al centro escolar y eliminar los puntos que daban los colegios por circunstancias específicas o ser antiguo alumno. En su opinión se trata de "un retroceso" y de un proyecto de carácter "ideológico".
Así, la presidenta de Escuelas Católicas de la Comunidad Valenciana (ESCACV), Vicenta Rodríguez, ha manifestado, en declaraciones a Europa Press, que la desaparición del distrito único supone "un retroceso", ya que "los años que ha estado en vigor ha funcionado bien y ha permitido que las familias pudieran elegir".
Rodríguez tampoco ve razón para eliminar el punto que podía conceder cada centro --igual concertados que públicos, recalca-- y añade que, "si se piensa que esto favorecía a la concertada, es un error".
También se ha referido a la intención de regular la prohibición de que los colegios sostenidos con fondos públicos puedan pedir pagos. Al respecto, la responsable de ESCACV ha recalcado que eso ya está tanto en la LOE como en la Lomce y la enseñanza es "gratuita". "Sí hay, evidentemente, aportaciones voluntarias que hacen los padres para mejorar instalaciones o actividades escolares", ha argumentado.
Rodríguez ha criticado además que se hable reparto de alumnado con necesidades educativas especiales entre la red pública y la concertada. "Lo del reparto me parece que falta a la dignidad, los alumnos no son la bollería de la mañana ni objetos para equilibrar balanzas", ha reflexionado esta portavoz, que ha señalado que para que los colegios concertados puedan tratar mejor a este tipo de alumnos "hay que dotarlos, igual que a los públicos".
"Acogemos a todo tipo de alumnos y si no atendemos a más es porque no disponemos de los recursos. Hay que tratar este tema con más sensibilidad y dejar que las familias elijan", ha instado.
Por su parte, desde la Federación Católica de Asociaciones de Padres de Alumnos de Valencia (FCAPA), Vicente Morro ha hecho una valoración
"claramente negativa" del proyecto que prepara el departamento del conseller Vicent Marzà. A su parecer, es "un proyecto exclusivamente ideológico que no responde a ninguna justificación pedagógica o académica sino a un compromiso político que cumple el tripartito".
"COMBATIR A LA CONCERTADA COMO SEA"
Para esta entidad, el futuro decreto "revela miedo a la libertad de elección de las familias y representa una cierta animadversión, si no un grado más a la enseñanza concertada". "Se pretende combatir a la concertada como sea", ha resumido.
Moro agrega que este documento destila asimismo una "desconfianza en el conjunto del sistema de la comunidad educativa". "El conseller ha dicho muchas veces que los centros eligen a las familias; si eso fuera verdad, significaría que hay dudas sobre las comisiones de escolarización y los inspectores".
Igualmente, ha enfatizado la "injusticia" que supone hablar de reorganizar al alumnado con necesidades especiales si no se redistribuye paralelamente la financiación. "¿Habrá logopedas y especialistas en pedagogía terapéutica en todos los centros?; si no distribuimos los medios se estará cometiendo una injusticia con el alumno al forzarlo a ir a un centro distinto donde puede tener una situación de mayor dificultad", advierte.
En definitiva, la federación cree que este borrador es "un paso atrás que no mira por el bien de los alumnos y que impone una norma que quiere perjudicar a la concertada". "Y eso no casa mucho con proclamar la voluntad de diálogo", ha rematado.
