Novo dice que la tarjeta de residente para zona naranja costará dos euros y 50 céntimos el día de aparcamiento

Actualizado: lunes, 26 octubre 2009 17:14

Ábalos critica el transporte alternativo o público queda "marginado" con esta ordenanza

VALENCIA, 26 Oct. (EUROPA PRESS) -

El concejal de de Circulación y Transporte del Ayuntamiento de Valencia, Alfonso Novo, aseguró hoy que la tarjeta de residente para el aparcamiento en la nueva zona naranja, que se establece en la Ordenanza municipal de Circulación y Transporte tendrá un coste de entre uno y dos euros, mientras que para cada día de estacionamiento del vehículo, el propietario deberá abonar entre 50 y 60 céntimos de euros.

Novo realizó estas declaraciones en la rueda de prensa posterior a la Comisión de Urbanismo, donde se propuso la aprobación inicial de la modificación y adaptación a la Directiva Europea de las Ordenanzas de Circulación y ORA, que quedarán refundidas en un único texto.

El edil de Circulación explicó que los tiempos que se establecerán para el aparcamiento en esta zona serán un día, tres días o una semana, y cada jornada se tendrá que abonar entre 0,50 y 0,60 euros. Para poder estacionar en los lugares señalizados como zona naranja, se deberá ser residente, y los propietarios tendrán que disponer de una tarjeta de identificación que tendrá un coste de entre uno o dos euros. No obstante, recordó que estos precios se tendrán que establecer en una ordenanza fiscal.

En este sentido, Novo señaló que el Ayuntamiento optó por esta opción, --en lugar de una tarjeta anual de entre 60 y 70 euros que permita a los residentes pagar durante todo el año-- ya que consideró que es "más justo que se pague sólo en el momento en que se encuentra la plaza de aparcamiento". Asimismo, se limita el tiempo máximo a una semana para que "exista una mínima rotación".

De este modo, el concejal aclaró que el consistorio no tenía previsto aplicar los dos pagos --el de la tarjeta y también por día de estacionamiento-- sino que barajaban dos opciones. Así, respondió al concejal socialista, José Luis Ábalos quien explicó que una de las alegaciones presentadas por su grupo "trata de evitar una doble imposición, al tener que pagar la tarjeta de residente, y también el uso".

Por lo que se refiere al carril-bici, el concejal socialista reclamó que sea "expreso para bicicletas, en la acera o en la calzada, pero nunca quitando espacio a los peatones". Al respecto, criticó que el "rey de la circulación es el vehículo privado y otros medios alternativos y transportes públicos quedan marginados".

Frente a ello, Novo destacó que la ordenanza se realiza "aprovechando que había que adaptarla a la normativa europea", pero que se incluyen cuestiones que "no estaban previstas" como es el caso del carril-bici, los alquileres de bicicletas o los aparcamientos para residentes. Añadió que es "muy difícil compatibilizar las necesidades de la ciudad", pero que "se adaptará el carril-bici para dar seguridad a todos".

INFRACCIÓN GRAVE PARA 'GORRILLAS'

Por lo que se refiere a la regulación de los 'gorrilla', la nueva ordenanza municipal establece a los agentes municipales como "únicas autoridades con capacidad para regular el tráfico" y especifica que "sólo a ellos corresponde esta función". De hecho, se señala como "infracción grave" que los particulares ordenen el tránsito rodado, el estacionamiento de los vehículos o reserven plazas, según se especifica en el artículo 17 del texto.

El concejal comentó que en la Ordenanza también se establece la limitación total del paso de camiones de más de nueve toneladas en el perímetro de las rondas, salvo excepciones como Mercavalencia o el polígono Vara de Quart, entre otros.

Del mismo modo, apuntó que los aparcamientos de motocicletas, "no paran de incrementar" y precisó que, en estos momentos, hay 2.000 plazas señalizadas directamente desde el Ayuntamiento en el primer cinturón urbano (desde Guillem de Castro hacia el interior), además de las instaladas por otras entidades públicas y privadas, como la Generalitat o las universidades. En el caso de las bicicletas, el Ayuntamiento ha adecuado más de 3.500 plazas, a las que se suman las de otras entidades.

Por su parte, Ábalos lamentó que el equipo de Gobierno ha aceptado "muy pocas de las alegaciones" presentadas por los socialistas y que, en muchos casos, han contestado que los asuntos planteados por el PSPV "se escapan al propósito de la ordenanza", como es el caso del mantenimiento y planificación de los carriles-bici, las 'calles 30' o los planes de seguridad vial, entre otros asuntos.

Al respecto, el concejal reprochó que el texto --que no ha contado con el apoyo del grupo socialista-- "no incorpora ninguno de los desafíos ni retos que tiene la ciudad", con lo que está "condenado a continuas reformas cada vez que aparezca una novedad".