VALNCIA, 3 Dic. (EUROPA PRESS) -
El Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV) está siendo objeto de catas arqueológicas y estructurales con el objeto de poder valorar su estructura y proyectar un nuevo edificio judicial sin perder su esencia.
Esta sede judicial data de 1758 y el pasado año comenzaron los primeros trabajos para estudiar la estructura y arrancar unas obras que, probablemente, se alargarán cuatro años más, según estiman los arquitectos que este jueves han visitado el edificio en compañía de la consellera de Justicia, Gabriela Bravo.
El complejo consta de diferentes elementos materiales como hormigón, metálica y madera, que se han ido incorporando a lo largo de los años, según las necesidades. La idea con el nuevo proyecto es conservar la imagen de la sede, su esencia, pero adaptarla al nuevo siglo XXI.
Bravo ha explicado a los medios de comunicación tras la visita que las catas que se están practicando tienen una importancia "extraordinaria" por dos razones: porque va a permitir a los arquitectos tener un conocimiento exhaustivo del estado del edificio; y porque ese conocimiento también se incorporará al proyecto de ejecución e impedirá retrasos y otra serie de problemas.
"Cuanto mejor se conozca el edificio, más evitaremos problemas posteriores que supongan una paralización de las obras", ha explicado Bravo.
A juicio de la consellera, se está haciendo un trabajo de una "importancia capital" porque se trata de un edificio del siglo XVIII declarado Bien de Interés Cultural. Así, hay que mirarlo con una doble perspectiva: la funcional, pero sin perder de vista que es un edificio patrimonio cultural de la ciudad.
La sede, antigua Casa de Aduanas, es un "referente histórico", ha insistido Bravo, quien ha agregado que la previsión es que las catas finalicen en enero y, a partir de ese momento, el estudio de arquitectura tiene previsto un plazo de dos meses para acabar el proyecto de ejecución.
El proyecto básico, ha recordado, ya se presentó en 2019 y, a partir de marzo, los técnicos de la Subdirección de Infraestructuras revisarán el proyecto y se iniciará la licitación de la ejecución de obra cuyo precio está tasado en 24.300.000 euros.
ENERGÍA GEOTÉRMICA Y SIN VIVIENDAS
La sede judicial incorporará, además, un sistema de energía geotérmica y supondrá un ahorro de un 80% de lo que supondrían las placas fotovoltaicas.
Así mismo, desaparecerá la vivienda destinada a la Presidencia que lleva ya muchos años sin utilizarse. "Eran espacios, desde un punto de vista arquitectónico, que carecían de interés y que estaban muy afectados por la humedad", ha dicho uno de los arquitectos. Se trata de 11.000 m2 --9.000 útiles-- que se incorporarán al ámbito funcional de la sede, ha dicho Bravo.
El inmueble se construyó entre 1758 y 1802 y en 1828 se transformó en una fábrica de tabacos. Posteriormente, en 1914, se adaptó para convertirlo en un palacio de Justicia. A lo largo del tiempo se han hecho innumerables intervenciones parciales de todo tipo hasta su declaración como Bien de Interés Cultural, en especial el conjunto escultórico que es obra de Ignacio Vergara, el autor de la portada del Palacio del Marqués de Dos Aguas de Valncia.
Con la rehabilitación del TSJCV se recuperará el volumen original del Palacio y se eliminarán elementos añadidos desde hace años que son impropios y no tienen valor histórico ni arquitectónico, ni tampoco función actual.
También se revalorizarán los espacios patrimoniales más importantes como los patios interiores, las escaleras, las bóvedas, la Cambra, los salones y los elementos ornamentales. Además, se recuperará el sistema de cubiertas original del edificio, así como el de los patios interiores para mejorar la iluminación y ventilación del inmueble.
Por otra parte, se procederá, además de a la consolidación estructural de todo el edificio, a la mejora de su aislamiento, tanto en sus fachadas, como en las cubiertas, carpinterías y soleras en contacto con el terreno. Se renovará por completo la instalación eléctrica y luminaria, el sistema de detección y protección contra incendios, el de climatización y ventilación y el de saneamiento y distribución de agua.
