VALENCIA 18 Ene. (EUROPA PRESS) -
La ermita de la localidad valenciana de Picassent, dedicada a su patrona, la Virgen de la Vallivana, ha concluido su restauración tras la consolidación de los muros y el esgrafiado de las paredes de la contrafachada del templo, que data del siglo XVIII, según informaron fuentes del Arzobispado en un comunicado.
Con estas obras, financiadas por la feligresía y la cofradía de la Virgen de la Vallivana junto a la Fundación Pere Compte, finalizan los trabajos en la ermita, tanto en su exterior como interior, que se han prolongado a lo largo de cinco años.
La restauración ha incluido, además, la renovación de cerca de 2.000 tejas de la cúpula, "que no han podido recuperarse al encontrarse muy deterioradas", según explicó el presidente de la cofradía Virgen de la Vallivana, Francisco Santana.
Se da la circunstancia de las tejas antiguas, de fabricación artesanal, "se pusieron a la venta a petición de los propios feligreses y ahora las conservan en sus hogares como recuerdo y símbolo de gran cariño y devoción hacia la patrona", dijo.
Igualmente, ha sido rehabilitado el tambor del templo, sus cubiertas, la fachada y todo su interior, incluida la imagen de la patrona, según Santana, que aseguró que la ermita se construyó en el siglo XVIII para agradecer a la Virgen de la Vallivana su intercesión por el fin de una epidemia de peste que asoló la localidad.
El templo, de estilo barroco, que cuenta con 300 metros cuadrados de superficie, ha renovado, también, los bancos y la iluminación. Por su parte, la imagen de la Virgen de la Vallivana, obra del escultor valenciano Enrique Galarza, que preside el templo, ha sido limpiada y restaurada. Se trata de una imagen de vestir realizada con madera de cerezo en 1939 "ya que la original fue destruida", según Santana.