Más de 400 obras del Museo Picasso de París podrán verse a partir del 5 de febrero en el Reina Sofía

Actualizado: viernes, 7 diciembre 2007 22:20


PARIS, 7 Dic. (EUROPA PRESS) -

Un total de 407 obras de Pablo Picasso que van desde la escultura a la pintura pasando por los grabados, dibujos, cerámicas y fotografías podrán verse desde el próximo 5 de febrero de 2008 en el Museo Reina Sofía de Madrid, gracias al préstamo realizado por el Museo Nacional Picasso de París. La exposición permanecerá abierta hasta el 5 de mayo.

La galería parisina recibirá a cambio 3,5 millones de euros que destinará íntegramente a las obras de remodelación del edificio que alberga una de las colecciones más importante del pintor malagueño, un palacete del siglo XVII situado en el corazón de París que se abrió como museo en 1985.

El acuerdo del préstamo fue firmado esta mañana en el Museo Picasso por el ministro español de Cultura, César Antonio Molina, y su homóloga francesa, Christine Albanel. Ambos lo calificaron de "excepcional" al tratarse de un proyecto de una dimensión y una ambición "sin precedentes".

Se trata, en palabras de Molina, de una retrospectiva "única" que permitirá por primera vez que las obras procedentes del archivo personal del pintor se encuentren por primera vez frente a frente con las del Reina Sofía y, especialmente, con el Guernica.

"De este modo reuniremos, al menos simbólicamente, las dos almas de Picasso", ilustró el ministro de Cultura quien destacó que la exposición va "más allá de lo puramente artístico y pictórico" y se enmarca en la que calificó de "excelente" relación bilateral entre España y Francia reflejada en la cooperación en el ámbito cultural.

La colección del Museo Picasso de París cubre los principales periodos artísticos del artista y la muestra de Madrid permitirá realizar un verdadero repaso de su obra desde los años de juventud hasta sus últimas creaciones.

4.000 METROS

Las obras ocuparán unos 4.000 metros cuadrados y la mayoría se expondrán en la gran galería que alberga el Guernica. Se trata de la primera vez que las colecciones del Museo Picasso comprendidas entre el periodo que va de 1936 a 1945 se verán junto a la obra maestra del pintor malagueño.

Para acompañar la exhibición, que llevará por título 'La colección del museo nacional Picasso, Paris', se ha elaborado un amplio material didáctico (catálogos, audio guías, conferencias), así como archivos fílmicos, sonoros y escritos conservados en la colección del museo parisino.

El acuerdo entre el Reina Sofía y el museo Picasso de París supone el primer paso para desarrollar durante los próximos diez años sus relaciones institucionales. De hecho, están previstas coproducciones, exposiciones y proyectos comunes en el ámbito de la investigación sobre el arte moderno, la restauración de las obras de Picasso, la formación de personal científico, actividades pedagógicas y difusión al gran público mediante producciones de televisión.

El museo parisino ha puesto en marcha un amplio programa de préstamos a la vista de las importantes obras de renovación y ampliación del edificio que alberga las obras del artista. Después de España, la colección picasiana viajará a China, coincidiendo con la celebración de los Juegos Olímpicos, y a Japón.

LA IMAGEN DE ESPAÑA, EN PARÍS

Por otro lado, César Antonio Molina firmó ayer con el Ayuntamiento de París y el ministerio francés de Cultura otro acuerdo para inaugurar el próximo mes de julio, con motivo de la presidencia francesa de la Unión Europea, una exposición que prepara el Reina Sofía sobre la imagen tradicional de España y su influencia en la las vanguardias artísticas de comienzos de siglo.

La exhibición llevará por título 'La noche española', contará con más de 300 obras de 150 artistas, entre los que destacan nombres como Manet, Degas, Modigliani o Picasso y será abierta al público en el Petit Palais de París.

Además, el ministro asistió a la firma de un acuerdo entre los directores de las Bibliotecas Nacionales de España y Francia, Milagros del Corral, y Bruno Racine, respectivamente. El objetivo del mismo es colaborar en la digitalización de los fondos para evitar robos y deterioros de material e intercambiar experiencias sobre el funcionamiento de una biblioteca moderna.