Luis de Pablo, ganador del premio Tomás Luis de Victoria

MADRID 5 Mar. (EUROPA PRESS) -

El compositor bilbaíno Luis de Pablo Costales ha sido galardonado con el IX Premio Iberoamericano de la Música Tomás Luis de Victoria, considerado como el Cervantes de la música. Según el presidente del jurado del galardón, Antonio Martín Moreno, el compositor, con más de 200 obras a su espalda, "es un personaje que ya está en la Historia".

"Hemos trabajado con mucho acuerdo en la sesión, en la que se decidió por mayoría el nombre de Luis de Pablo. El 'problema' de este premio, si es que podemos llamar así, es la cantidad de participantes y su tremenda calidad", ha explicado Martín Moreno en declaraciones a Europa Press.

El jurado ha querido destacar "la calidad de su obra creadora que, tratando todos los géneros y siempre ligada a una profunda reflexión teórica, ha conseguido articular a lo largo de una vida y con un indiscutible reconocimiento internacional, un mundo expresivo propio en el contexto de una generación excepcional de compositores españoles e influyendo directa o indirectamente en los más jóvenes".

Por su parte, el propio Luis de Pablo, miembro de la llamada generación de 1951, ha agradecido una distinción que le llega con "79 añazos" y de forma "inesperada". Como compositor de vanguardia, reconoce que no lo tuvo fácil al principio de su carrera, y pese a que el panorama musical "ha cambiado" mucho en España, considera que todavía "los países donde se protege a los artistas son muy pocos".

"En España tuve ciertos problemas para que aceptasen la música de nuestros días", dice Luis de Pablo, que recuerda que alguien supiera que existían creadores con sus inquietudes, se tenía que salir fuera y conseguir éxito internacional. "Ahora vivo sólo de la composición, pero he hecho de todo", rememora el artista, que puntualizó que en un país donde lo tenían difícil hasta los campesinos, no iba a ser menos para los músicos.

La España actual comparada con los años de la posguerra es "la Atenas de Pericles". En esta línea, De Pablo señala que el problema es que se está perdiendo el concepto de cultura, porque "se la deja morir y no se la ayuda". "Eso, con el fútbol, no pasa", argumenta el compositor que prepara una obra para órgano, con orquesta, que se estrenará en su "pueblo", Bilbao, a finales de 2009.

Nacido en Bilbao en 1930, Luis de Pablo es una de las figura más destacadas de la vanguardia musical española. Inició sus estudios musicales de niño en Hondarribia (Guipúzcoa), prosiguiéndolos en Madrid y más tarde en París con Max Deutsch, alumno de Schoenberg.

En 1958 formó el grupo Nueva Música, junto al recientemente fallecido Ramón Barce, y en 1961 Tiempo y Música, cuyo fin era la búsqueda de un espacio para la difusión de la música más viva y novedosa, dando a conocer la propia y la de sus contemporáneos que constituían un eslabón perdido entre las tardías consecuencias del nacionalismo posterior a Falla y los nuevos lenguajes atonales.

Ya en 1965 crea el Grupo Alea, que vino a sustituir y a incrementar la actividad concertística y difusora de Tiempo y Música y que supuso la constitución del primer laboratorio de música electroacústica del país. El talante culto, analítico y crítico que caracteriza a Luis de Pablo le ha facilitado una intensa labor de conferenciante y docente en universidades como las de Buffalo, Ottawa y Montreal.